Cada vez son más las personas que ven en Instagram una oportunidad de hacer negocios y comenzar así sus propios emprendimientos. Ya sea para tener ingresos extras, ahorrar para un viaje o como un primer paso para crear una pyme, esta red social debe estar presente si de marketing se trata.

La plataforma, que cada año suma millones de usuarios, es la más usada por los jóvenes y es la que miles de personas prefieren al momento de ofrecer sus productos. Por esto no es extraño encontrar cada vez más perfiles de marcas entre tus seguidores y seguidos.

Ropa, accesorios y comida son algunas de las cosas que se pueden “vitrinear” desde la comodidad de la casa a través de una pantalla de celular, en donde para acceder a lo que te gusta solo debes comunicarte con la persona o marca que lo ofrece, enviarle un mensaje o direct, acordar una cita y ya está. Nunca comprar fue tan fácil y entretenido.

Así fue para mí al menos cuando conocí a la Lactaría Vegetal Armonía, un emprendimiento de dos jóvenes, Angelo Quilodran y Tania Gonzáles, que decidieron empezar a elaborar productos que no contuvieran nada de origen animal y que fueran mucho más saludables y naturales. De esta forma averiguaron diferentes sistemas e invirtieron en una máquina para realizar sus productos con un sistema de prensado en frio.

Intrigada por probar alguna de las leches o quesos que venden me motivé y atreví a pasar por esa experiencia de hablarle por direct a un perfil en donde no sabes si dirigirte a alguien en plural o singular o femenino o masculino.

Pasado el proceso me di cuenta de que es como cualquier otra forma de mercado, pero esta por ejemplo permite una mayor cercanía y personalización con el cliente, así lo cree Angelo que explica que “por ejemplo cando nos piden una leche de almendra, nosotros en las historias de Instagram mostramos cada uno de los procesos etiquetando a la persona, mostrando cómo se va realizando, entonces a ella le llega la notificación y sabe que en realidad el producto se está haciendo el mismo día en el cual se va a entregar y ve cómo se realiza”.

Estos jóvenes que empezaron este emprendimiento hace un par de meses ya cuentan con más de 2000 seguidores y han conquistado paladares no solo de Concepción sino de Chillán, Temuco e incluso tienen interesados en Colombia. “Vimos que el proyecto fue bastante exitoso y por ello pensamos en la idea de más adelante ampliarnos a un local. Pensamos postular más adelante a un Sercotec, pero ahí estamos viendo aun qué pasa”.

Así como para algunos la venta a través de Instagram es solo un primer paso para un emprendimiento mayor, existen otros perfiles que son administrados por jóvenes que comenzaron su idea con un fin en especifico, en el caso de Pamela Zurita, una estudiante de Ingeniería Civil Biomédica, la motivó el juntar dinero para unas vacaciones con su pololo.

De esta forma nació La Damasca, una tienda de collares que ya cuenta con más de 650 seguidores. Según cuenta Pamela, prefirió Instagram ya que este era mejor a la hora de relacionarse con los clientes. “Tenía la idea de hacerlo en Instagram y en Facebook, pero Instagram es mucho más fácil por el tema de hablar entre clientes, porque  siempre andan preguntando los horarios, la disponibilidad o  preguntas más especificas y Facebook es menos flexible en cuanto a eso. Instagram es mucho más instantáneo”

  “He comprado mil ropa por Instagram”

Así como hay diferentes tipos de perfiles, hay diferentes tipos de clientas. Por ejemplo María Gracia Zerga es una estudiante de enfermería que ya está acostumbrada a realizar compras por la plataforma online. Carteras, ropa y zapatos son algunas de las cosas que ha comprado a través de Instagram, la cual prefiere por su comodidad y precios.

Para ella comprarle a alguien de Concepción o de afuera es un acto de confianza, así fue la primera vez por lo menos. “Estaba muerta de miedo porque no sabía si iba a llegar, porque uno tienen que pagar antes de que te envíen el producto. Pero la primera vez que lo hice igual vi todas las fotos, porque así uno va viendo si tiene hartos comentarios, si harta gente les ha comprado o ellos suben fotos de conversaciones por Wathsapp con “clientes felices”, entonces al ver que tenía harta relación con los clientes les compré. Después de hacer esa primera compra las otras las hice mucho más confiada”.

Pese a gustarle mucho la comodidad que ofrece esta red social, reconoce que a veces no se puede apreciar tan bien la realidad en una foto. “Por ejemplo una vez compré un chaleco que en las fotos se veía súper lindo y cuando me lo probé no me quedaba tan lindo y ahí no se podía hacer nada”

De esto no se preocupa mucho Katia Valdés, una joven matrona que compra principalmente “chucherías” como ella define. Lápices, coles, y cosas de papelería que en la ciudad son mucho más caras. Según nos explica, en cuanto a confianza “encuentro que son  mejor tiendas, porque le da un tipo de seriedad por así decirlo y te da un poco más de confianza.”

 No solo marcas o tiendas

Crear un perfil exclusivo para la venta de productos no es la única opción, igual existen personas que utilizan su propio perfil para mostrar sus rutinas y lo que hacen. Así lo hizo este verano Isidora Gonzáles, una estudiante de psicología que decidió ganar dinero haciendo algo que le encanta: cocinar y aprovechó la red social para mostrar a

sus amigos y seguidores lo que estaba realizando.

Pese a que combinó varias formas de difusión, reconoce que Instagram fue de gran ayuda, pues se generaba más cercanía con sus seguidores, los cuales veían a través de sus historias gran parte del proceso de la elaboración, entrega y recepción de los productos. Además reflexiona, que al tener seguidores que estén pendientes de lo que haces, los puede motivar a comprar los productos, “el hecho de que la gente se interese por tu imagen puede que haga que se interese por tus productos.”

Lo que queda claro es que el número de usuarios de Instagram va en aumento y lo relacionado al marketing a través de esta plataforma también, así que los interesados en emprender con un negocio sin realizar tantos tramites y gastar tanto dinero solo deben atreverse y estudiar a las marcas que han tenido éxito en esta joven y popular red social.