El dilema de la privacidad digital Sociedad por Nicolás Verdejo - 26 abril, 201927 abril, 20190 Ante las críticas que han recibido durante los últimos años algunos servicios digitales por su manejo de la privacidad de sus usuarios, Derechos Digitales y Humanos Digitales ofrecen algunas recomendaciones. La privacidad digital es un tema en torno al que se recientemente han generado diversas controversias. Corría 2013 cuando Edward Snowden reveló información sobre el proyecto PRISM, iniciativa de espionaje digital del gobierno de Estados Unidos. Posteriormente, en 2018 el caso Cambridge Analytica volvió a remecer la imagen de Facebook. Además, paralelamente, durante los últimos años el buscador DuckDuckGo, además de posicionarse como una alternativa competititva, ha sostenido una campaña informativa sobre esta materia. Hasta Tim Berners-Lee, el creador de la World Wide Web, en más de una ocasión se ha manifestado preocupado por esta materia. Estos son sólo algunos casos destacados que dan pie para reflexionar desde nuestra posición como usuarios de diversos servicios digitales. ¿Qué podemos hacer desde nuestra posición de usuarios para enfrentar esta situación? Vladimir Garay, Director de Incidencia de la ONG Derechos Digitales y Tabita Moreno, Directora de Investigación de la Fundación Humanos Digitales nos entregan algunas ideas y recomendaciones para comprender y actuar ante este fenómeno. Respecto a los casos previamente citados, desde Derechos Digitales nos indican que la clave está en comprender estos incidentes como parte de un problema más complejo. Es de gran importancia que las empresas sean transparentes respecto al tipo de información que recaban, con quién la comparten y para qué se usa, así como también, por parte de los usuarios de los servicios que están disponibles en la web, que estos tengan conocimiento de los modelos de negocios que hay tras ellos. Precisando en el punto relativo al manejo de nuestra información, desde Humanos Digitales nos señalan que el seguimiento virtual de nuestros datos es prácticamente invisible, en tiempos donde una misma empresa matriz ofrece una serie de “servicios hermanos” que pueden cruzar entre sí la información recopilada. Actualmente, incluso para los expertos resulta complicado llegar a entender el alcance de lo que empresas como Facebook o Google están haciendo con nuestros datos. ¿Deberíamos prescindir por completo de nuestras cuentas de servicios asociados a empresas cuestionadas por su gestión de la privacidad? Vladimir Garay nos señala que la evaluación corre por cuenta de cada usuario, considerando el masivo uso de algunos servicios que son para algunas personas las únicas vías de comunicación personal, difusión pública e incluso de desarrollo comercial. ¿Cómo enfrentar esta situación sin renunciar a los servicios que usamos? Tabita Moreno nos ofrece algunas recomendaciones, como no compartir información personal en redes sociales, personalizar las opciones de privacidad de nuestras publicaciones, contactar solo con personas que se conocen en la vida offline, desactivar opciones de geolocalización asociadas a las publicaciones en redes sociales y evitar la vinculación entre redes sociales distintas. La privacidad digital debería ser una preocupación permanente para cada usuario de Internet. Como dice Snowden en su canción-manifiesto: “si no la defiendes, ¿quién lo hará?”