Proyecto Bicentenario pone en riesgo a más de 300 vecinos de infectarse con Virus Hanta, Hepatitis y Cólera en La Unión

Todo comenzó en el frío invierno de junio de 2020. La empresa García Gross realizaba trabajos de reconstrucción del alcantarillado en el sector Aldea Campesina en la comuna de La Unión, Región de Los Ríos. Cuando las calles rebosaban por las lluvias y había cada vez menos agua potable en el sector, la constructora García Gross se declaró en quiebra, dejando sin terminar las obras correspondientes. Cámaras colapsadas, mal olor y el escurrimiento de residuos tanto en viviendas como en la vía pública, son algunas de las consecuencias que dejó el trabajo olvidado, lo que se suma al riesgo de transmisión de enfermedades infecto-contagiosas.

El proyecto había nacido en conmemoración al bicentenario de La Unión y era la promesa para acabar con los problemas sanitarios en el sector. Sin embargo, lo que parecía ser la luz al final del túnel resultó ser lo que hundiría aún más en el excremento y oscuridad al lugar. Aldea Campesina ha sufrido durante más de 60 años un problema de alcantarillado que, a la fecha, parece no tener solución. Al menos no una limpia y sin enfermedades como el virus Hanta como secuela.

Pese a la pandemia, en agosto del 2020 los habitantes del sector salieron a las calles a manifestarse para exigir que se establezca emergencia sanitaria en el sector, el cual acoge a más de 300 unioninos. Tal es la emergencia, que uno de los focos de preocupación son los adultos mayores, quienes son los principales en tener enfermedades crónicas y complicaciones por COVID-19, lo cual incrementa el riesgo al estar expuestos a este ambiente.

Después de un mes, en donde el alza de contagios no pasó desapercibida, las autoridades denominaron como “irresponsable” las manifestaciones que los vecinos llevaron a cabo. Aunque, de todos modos, escucharon sus plegarias y se coordinó una reunión con el entonces ministro del Interior, Víctor Perez,junto a  la senadora, Ena von Baer. Fue así como el alcalde de La Unión, Aldo Pinuer, y la directiva de la junta de Vecinos del sector Aldea Campesina llegaron hasta La Moneda para dar fin al problema de alcantarillado a medio reparar que tanto ha atormentado a los locatarios de la zona.

Con millones y la solución en sus manos

Fue así como el Ministerio del Interior dispuso de 94 millones de pesos para obras complementarias que ayudarían a paliar el problema sanitario que aquejaba a los vecinos. Esto incluía una limpieza para retirar los residuos sólidos y líquidos en el acceso principal de la comuna.Un lugar simbólico, pues fue allí donde los habitantes de Aldea Campesina se manifestaron a través de un llamativo letrero: “Bienvenidos a la comuna con olor a mierda”.

Sin embargo, el problema de los malos olores continúa. “Lamentablemente, el camión contratado por el municipio para destapar las cámaras del sector no realizó limpieza. Lo que hizo fue la evacuación del líquido de las aguas servidas, dejando todo lo sólido que en estos momentos se sigue acumulando en nuestras alcantarillas”, señaló Rosa Ulloa, presidenta de la Junta de Vecinos de Aldea Campesina.

Además, la dirigente vecinal señala que las mala gestión afectó en los fondos obtenidos. “De los casi 100 millones de pesos que nos dio el Ministerio del Interior, ya no nos quedaba nada en enero, según la información del municipio”, describió.

Fue así como en menos de tres meses los vecinos quedaron igual o incluso peor de lo que estaban en agosto.

“Esto solamente fue una solución primaria (…) es el primer paso de lo que se espera realizar finalmente la cual sería nuevos colectores de agua para el sector”, mencionó Pedro Delgado, jefe de la Secretaría Comunal de Planificación. Una solución que no aceptan ya que eso significaría entregar su pozo de agua a Essal, lo cual no sería conveniente, puesto que tendrían que pagar mucho más por el servicio que lo que hacen actualmente

Vecinos «de luto» manifestándose en enero 2021. «Los políticos se fueron y los olores siguieron» fue el lema que utilizaron en sus canticos.

Hundidos en el hoyo que dejó la empresa García Gross

El pasaje Torrijos ya tiene gran parte del problema del alcantarillado solucionado, no obstante, la red aún no logra conectarse con la principal, dado que deben concretar algunos detalles, como cunetas y redirección de líquidos, en la Aldea Campesina. Entonces, ¿cuáles son los riesgos? Cámaras de pozos sin tapa, completamente abiertas, quedando un peligro constante para los niños del lugar. Peligro que fue solucionado por los propios vecinos del sector colocando madera encima.

Letrero que da la bienvenida a todos los visitantes en cuesta Felix Queuch

El jefe de SECPLAN, Pedro Delgado, señala al respecto que “todo se prolongó más de lo esperado y la empresa Osvaldo Arriagada Opitz solicitó ampliación del plazo y los recursos que ya se tenían estimados, esto se está evaluando en el consejo”. Debido a la prolongada espera de los vecinos del sector, aclara que “teníamos muy altas las expectativas y el proyecto resultó ser más complejo de lo que es. Además, con las lluvias que se nos avecinan todo se complicará aún más”, concluye.

Es así como nuevamente llegará el invierno y los más de 300 unioninos se verán hundidos en excrementos, aguas servidas, ratones y enfermedades. Como señalan ellos, “nosotros sufrimos mucho más por esto que por la COVID-19”.

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