El sueño de la generación Z: adiós latinoamérica

Adolescentes de distintos puntos del país se aventuran en plena pandemia a trasladarse junto a nuevas familias a ciudades desconocidas en busca de experiencias y conocimiento.

A lo largo de este año y medio de pandemia, diversas actividades han debido ser reprogramadas e incluso suspendidas. Los intercambios escolares no han sido una de ellas. Valientes adolescentes han decidido salir del país en búsqueda de nuevas experiencias.

Diversas organizaciones, tanto públicas como privadas, dan la opción a jóvenes en etapa escolar de trasladarse a países, sobre todo europeos y norteamericanos, para aprender sobre los idiomas nativos y culturas tan distintas a la chilena. 

Inversiones en plena crisis

Según Contact Mundo, a pesar de encontrarse las condiciones para viajar, muchos estudiantes que tenían programado su viaje para el 2020, decidieron posponer esta experiencia para el 2021. De esta forma lo pudo corroborar Antonella Sfrasani (17), quien luego de ser beneficiada con una beca del 30% para ir a Estados Unidos a través de American Field Services en 2020, decidió aplazar esta experiencia por las condiciones sanitarias de su país de destino.

Producto de esto, es que diversas organizaciones comentan que este año la demanda de estos programas ha aumentado a casi el doble, todos considerando las becas como la única opción de vivir algo así, por lo menos para una gran mayoría de los intercambistas. 

Evelin Riquelme, quien tiene fecha de viaje para agosto de este año, aun no elimina la posibilidad de dejar en pausa su beca e irse a Italia en 2022. Comenta revisa la situación de ese país que ha sido azotado por esta crisis sanitaria.

A pesar de esto, todos los padres con los que hablamos para este artículo confirman que aunque implique un gran esfuerzo, saben que es una gran inversión para el futuro de sus hijos y todos los conocimientos que adquirirán en esta experiencia.

En el caso de los menores de edad, deben hacer un sinfín de papeles, no solo para la postulación de las respectivas visas, sino también todo lo que implica que un menor de edad salga del país sin la compañía de sus padres.

Las diferentes agencias que generan estos servicios hacen un acompañamiento respecto tanto a la tramitación como a los viajes entre aeropuertos. Fuente: Pinterest.com.

Distintas preocupaciones bajo un mismo contexto

Por una parte, Evelin Riquelme (16), Karen Ordenes (16) y Hedwing Schmith (17) están preocupados principalmente por la convivencia tanto con sus compañeros nuevos, como con la familia anfitriona en el país de destino, además de  aprender todo lo posible de un nuevo idioma y cultura. También es importante para ellos este nuevo paso en sus vidas, ya que son considerados por sus familias como personas más independientes. Entre bromas comentan su preocupación de conseguir el blue passport y no querer volver.

Y por otro lado, Ruth Burgos, Karen Diaz, Sara Cifuentes, quienes son las respectivas madres de estos jóvenes, les preocupa profundamente como la crisis sanitaria podría impactar negativamente la experiencia de sus hijos. Además, comentan estar nerviosas y ansiosas de conocer a las familias anfitrionas, quienes serán los encargados de recibir y acoger a sus hijos en esta aventura. Como es natural también, se preocupan de no estar tan cerca como quisieran bajo cualquier emergencia.

Los niños y niñas no solo interactúan con las comunidades que los reciben, durante el proceso también se reúnen entre intercambistas. Fuente: rotary4320.com.

La salud más allá de la experiencia

American Field Service tuvo que modificar sus seguros de salud para asegurar así tanto a los alumnos becados como a los autofinanciados y a sus tutores la seguridad de estar respaldados por la agencia en caso de contagio. Además de, obviamente, todos los inconvenientes de salud que se podrían desarrollar durante los meses que están de intercambio los menores de edad.

Ya que en Chile hasta esta semana los menores de edad no tenían posibilidad de ser vacunados, Ruth, madre de Evelin, comentó que tanto si se le daba la posibilidad de vacunar a su hija en Chile, como si fuera en el país de destino, no lo dudaría en ningún momento, ya que prefiere prevenir con todo lo que esté a su alcance para que la experiencia sea lo mejor posible.

En el caso de Sara, madre de Hedwig se siente aliviada, ya que su hija por temas de salud, tiene la primera dosis y podrá ser inoculada con la segunda antes de su viaje.De esta forma nos percatamos que a pesar de hablar con personas de distintos estratos sociales, que se dirigen a diferentes países, tanto las preocupaciones de los adolescentes, como las de los tutores son las mismas. Todos aspiran a que esta gran experiencia no se vea afectada por la crisis sanitaria pero ponen el pecho ante las balas frente a las adversidades que puedan presentarse.

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