Cada vez más se popularizan las apuestas deportivas en nuestro país. Un negocio que crece sin regulación y propicia la ludopatía en muchos usuarios desde el teléfono móvil.

Fue el partido en la batalla por el descenso el peak en lo que va del año . Si Colo Colo  perdía ante la Universidad de Concepción el miércoles 17 de febrero, el descenso de los albos quedaría sellado. Uno de los clubes chilenos más populares estuvo a punto de ser relegado a Primera B, y las casas de apuestas reflejaron el gran interés del público: en la plataforma chilena XPerto-Polla, la victoria del Cacique fue valorada en 1,95 por cada peso apostado. En la plataforma chilena XPerto-Polla, la victoria del Cacique se pagó 1,95 veces frente a las 2,90 veces de los rivales penquista. En Betsson, una de las principales casas de apuestas del mundo, se pagó un sorteo 3,10 veces por el empate en los 90 minutos de juego. Hasta el día de hoy, ha sido el partido que más apuestas ha generado en nuestro país. Tan solo en Coolbet, una de las casas de apuestas más populares en Chile, hubo más de 800 millones de pesos en juego.

La noticia de que los albos podrían descender por primera vez en su historia generó varios millones de pesos para las casas de apuestas en Chile, donde el negocio aún no está regulado. Según datos de Statista, un sitio web de estadísticas alemán que proporciona información de mercado, se espera que el negocio global de juegos de azar en línea, que incluye juegos de casino, póquer y apuestas deportivas, alcance alrededor de $ 60 mil millones. Aumentará a $ 93 mil millones para 2023.

La casa de apuestas más popular del mundo es la empresa británica Bet365, valorada en 1.59 mil millones de dólares. Esta empresa es una de las muchas que se han introducido a través de Internet en Chile en los últimos años. Sin embargo, hasta el momento la única casa de apuestas  aprobada y regularizada en Chile es la Polla Chilena de Beneficencia, que permite realizar apuestas en algunos juegos durante la transmisión en vivo con su juego Xperto, al igual que las empresas internacionales.

Según los balances de la compañía, sus juegos, no solo en línea, generaron $ 19,2 mil millones en apuestas en 2019. Las áreas relacionadas con el fútbol recaudaron más de $ 17 mil millones, lo que representa el 92% de los ingresos.

Polla sabe que las apuestas digitales van en aumento, pero según Marco Ulloa, subdirector de prensa y previsión deportiva, «es imposible saber cuántos jugadores activos hay en Chile porque no tenemos ningún dato de todos los que juegan en las diversas plataformas irregulares. Ni siquiera podemos medirlo «, dice.

Un estudio de Sherlock Communications el año pasado encontró que el mercado de juegos de azar en línea en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Perú estaba valorado en $ 5 mil millones de dólares.

Un negocio que no para de expandirse

El fenómeno de las apuestas deportivas online se ha disparado en los últimos 15 años. Con tan solo buscar “apuestas deportivas” en Google obtendrás millones de resultados.

Es fácil entrar en este mundo. Solo tienes que registrarte con una dirección de correo electrónico y pagar con tarjeta de crédito, tarjeta de débito o Servifácil y Caja Vecina, entre otros. Además, la mayoría de estas empresas tienen aplicaciones a las que puede ingresar desde su teléfono celular para no tener que depender de una computadora.

En comparación con otros países del continente, como Perú, Brasil o Colombia, donde los negocios son cada vez más importantes, la popularidad de las casas de apuestas en Chile solo se ha desarrollado lentamente. Quienes están familiarizados con el mercado creen que 2019, cuando el fútbol chileno fue anunciado por las casas de apuestas, fue el punto de inflexión de este mercado en nuestro país.

Fue entonces cuando las apuestas empezaron a popularizarse. No es casualidad que el torneo de Primera B del año pasado se llamara «Campeonato Juegaenlinea.com», una casa de apuestas de origen venezolano. De hecho, el mismo campeonato este año se llama Ascenso Betsson. Además, cada vez se han colocado más vallas publicitarias de empresas como Coolbet, Betsson, Betway, Sportingbet, Rojabet y otras a un lado del campo.

Rojabet, empresa especializada en apuestas y juegos de azar online con licencia de Curazao -así lo dice en su sitio web- es auspiciador oficial de Universidad Católica, Deportes Antofagasta, Audax Italiano, Curicó Unido, Santiago Wanderers y DeportesTemuco.

Los tipster: un mercado detrás

Ignacio Pozo (27) es un apostador frecuente. Este periodista empezó a apostar en Polla Xperto con su padre los fines de semana. Apostaba entre $ 500 y $ 1,000 dependiendo de cuánto dinero tuviera. Continuó esta tradición durante muchos años hasta que, durante la pandemia de 2020, decidió probar suerte en los juegos de azar en línea después de ver un anuncio en la televisión.

«Pongo $ 10000 al mes, hago diez apuestas por un valor de $ 1000, juego los cuatro fines de semana al mes y a mitad de semana; son ocho apuestas y dejo $2000 libres para otras fechas o para un fin de semana con muchos juegos. Si me gasto los $ 10000 por adelantado, no apuesto más y espero hasta el próximo mes «, dice Pozo.

Estudia antes de hacer cualquier cosa e incluso lleva un cuaderno con estadísticas de fútbol, ​​tenis y balonmano. Una de las razones por las que decidió cambiar de casa de apuestas fue porque quería apostar en más deportes, ya que SportingBet, la agencia en la que ahora juega, tiene múltiples opciones y, en su opinión, las probabilidades que ofrecen son mejores, es decir, paga más cuando su pronóstico gana.

Sus buenas apuestas lo llevaron a convertirse en tipster: una persona a la que se le paga por brindar información estadística sobre apuestas. «Tengo 12 suscriptores que son amigos o conocidos en este momento. Pido una suscripción mensual de $ 10000 o dos semanas por $ 5,000, proporcionando datos sobre fútbol, ​​tenis y balonmano. Aún no he desarrollado redes sociales, pero pronto Sí, espero cubrir un mundo más grande «, explica.

Aunque Ignacio Pozo es un tipster, recurre a sus colegas para deportes de los que tiene poco conocimiento, como el béisbol o el hockey sobre hielo. En cualquier caso, son muchos los tipsters gratuitos que se han convertido en tendencia en las redes sociales.

Un terreno ambiguo

A pesar de la popularización del juego online, este sistema aún no está legalizado en Chile. La legislación estipula que solo los casinos con licencia legal y una licencia emitida por la Superintendencia de Casinos de Juego pueden operar, pero esos permisos no se aplican a los juegos de azar en línea.

En todo caso, la Superintendencia de Casinos de Juegos manifiesta que “son lícitos al igual que los juegos de azar operados por las agencias Polla Chilena de Beneficencia SA (Xperto), Lotería Chilena de Beneficencia SA (Xperto), Lotería Chilena de Beneficencia SA (Xperto), Lotería de Concepción SA y los hipódromos».

Álvaro Ávila, abogado del bufete de abogados Alessandri, dijo que «las apuestas deportivas online son ilegales. Me gustaría decir que no están reguladas, pero funcionan sobre la base de una prohibición original. Aún así, no creo que la prohibición es exigible para las personas dado que las plataformas operan desde otros países, lo que dificulta mucho el control y en última instancia se encuentran en un limbo legal ya que, a pesar de su ilegalidad, aún operan en las áreas grises de la ley”.

No hay nadie en Chile que supervise a los proveedores de juegos de azar en línea. Cuando un apostador pierde todo su dinero, no hay nadie ante quien quejarse. Lo mismo sucede cuando alguien «arregla» los juegos. En Perú, España, Colombia, Inglaterra y varios otros países, las autoridades están investigando la existencia de amaño de partidos y sobornos en las ligas.

En 2019, un grupo de tenistas chilenos fue sorprendido manipulando juegos en una competencia en la que el coordinador estudiantil nacional del partido Revolución Democrática en ese momento, Carlos Pérez, era un gerente clave de la empresa.

Utilizaron el torneo Challenger en Santiago, el campeonato de tenis más importante de Chile, para organizar juegos falsos y presionar a los jugadores para que ganen o pierdan según lo requiera el momento.

Las grandes casas de apuestas afirman que quieren ser reguladas, pero temen que surjan leyes con muchas restricciones e impuestos que harán que su negocio sea menos atractivo. El Ministerio de Hacienda confirma que intentará regular el desarrollo de los juegos de azar en línea, incluidas las apuestas deportivas, los casinos y otras formas de juegos de azar con dinero.

Al hacerlo, quieren crear un mercado competitivo, proteger la seguridad de los jugadores y aumentar los ingresos fiscales, entre otras cosas, argumentan. Eso está por verse por ahora. El juego online seguirá funcionando de la misma forma y está claro que miles de chilenos seguirán apostando en estas plataformas a diario.

Colombia reguló los juegos de azar en línea en 2016 y otorgó licencias a cinco empresas. En la actualidad, hay 18 casas de apuestas en línea que generaron $ 1.5 mil millones de 2.7 millones de usuarios solo en 2019.