Pronto Copec: “El eterno bajón favorito”

Es domingo por la mañana luego de haber terminado una típica noche de bohemia penquista y necesitas culminar una gran jornada con comida rápida recién preparada. ¿Dónde puedes ir? Bueno, hay siete sucursales de una bencinera que te pueden ayudar. 

No mentiré, a las siete de la mañana luego de haber bailado por horas junto a mis amigos y amigas ya no queda energía. Las bebidas espirituosas ya se sienten en el cuerpo y solo nos queda coronar la noche con el conocido “bajón”. Nuestra próxima parada: la Copec. 

Pero, ¿por qué?  Nunca falla dicen algunos, supongo que es porque Pronto Copec, la tienda de conveniencia junto a la gasolinera, se encuentra abierta las 24 horas del día, los 365 días del año. Y ese domingo no era la excepción, ahí estaba, con fila para poder ingresar- el frío se sentía- pero era nuestra única opción. 

Para empezar, el lugar estaba sumamente ordenado y desde la entrada con el alcohol gel junto a una cámara termográfica que mide la temperatura, noté que existe un especial cuidado por respetar las medidas sanitarias. No habían mesas ni sillas dentro del local ya que no se podía consumir ningún alimento dentro de él. Sin embargo, afuera estaban ubicadas un par de ellas a una distancia entre sí para poder comer sin correr riesgo de contagio.  

Las imágenes de las promociones disponibles eran prometedoras, combos de hamburguesas y completos a precios económicos, pero ninguna opción vegetariana. Sentí bastante decepción, pues al no comer carne mis opciones se limitaron a unas papas fritas con queso, que a mi parecer no valían la pena por el precio que estaba pagando.  

Combo Vampiro Cheddar. Fuente: Prontocopec.cl. 

Pensé que tardarían en traer la orden- para mi sorpresa- pasados los 5 minutos gritaron nuestros nombres y se comenzó a llenar el mesón con nuestros pedidos. Sabía que las papas podrían no ser suficientes, así que las complemente con una clásica media luna. Sin embargo, al tan solo ver sobre el mostrador un queso cheddar perfectamente derretido con una base abundante de crujientes papas fritas, supe que había hecho una gran elección. Tanto mi opción dulce como salada cumplieron con mis expectativas, creando un menú vegetariano que no tiene nada que envidiar a otros locales emblemáticos penquistas. 

Por otro lado, en el local encontré servicios como cajero automático, artículos de viaje y abarrotes lo que lo convierte en un salvavidas para cualquier viajero con problemas.  

La combinación del ambiente de una madrugada movida en la ciudad, el servicio y la compañía hicieron que disfrutara la experiencia a al punto de no querer volver pronto a casa. ¿Elegiría Pronto Copec otra vez? Sí. No obstante, me gustaría ver un menú vegano en una próxima ocasión para poder degustar una hamburguesa junto a los míos.  

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