Hacer circular el plástico en Chile EntrelíneasPor Soraya Coñuecar - 8 abril, 2022 Aunque el uso de plásticos se encuentra cada vez más regulado y la ciudadanía se ha comenzado a interesar en el tema, ¿por qué no se avanza más rápido en sustentabilidad? Uno de los materiales modernos preferidos, sobre todo, por su versatilidad en su uso es el plástico. Su empleo ha llegado a tanto que donde sea que miremos, se encuentra, incluyendo envases, ropa, dispositivos tecnológicos, alimentos, entre otros. Una situación que se torna aún más preocupante cuando se considera su impacto ambiental, ya que es un componente que puede demora mil años en descomponerse. Aunque no cabe duda que Chile ha mostrado mejoras en sustentabilidad y regulación de la utilización del plástico, presentando normativas que han marcado un antes y un después en la sociedad, el país continúa teniendo un gran desafío en el tema. Recientemente, el Ministerio del Medio Ambiente junto a Oceana Chile dieron a conocer que en un año en el país se producen 23 240 toneladas de plásticos de un solo uso. ¿Se apoya la reducción de plásticos? En los últimos cinco años la legislación chilena incorporó dos normativas que han controlado en mayor cantidad la producción del material. Primeramente, se encuentra la ley de responsabilidad extendida del productor (REP), con la cual se pretende que los fabricantes e importadores gestionen de forma correcta sus residuos. En segundo lugar, está la más conocida por la sociedad chilena, la norma que prohíbe la entrega de bolsas plásticas de comercio en todo el territorio nacional. Chile tiene un gran desafío con la regulación de los plásticos. Foto de Jilbert Ebrahimi en Unsplash. Ahora bien, por parte de la ciudadanía también existe un gran interés. Constanza Maldini, estudiante universitaria, cuenta que desde temprana edad comenzó a comprender la importancia de separar la basura. “Más que hacerme feliz, es mi deber reciclar y tener al mundo en un mejor estado”, dice ella. Del mismo modo, Marlene Palma, una penquista de 34 años, admite que “hace aproximadamente un año que comencé a tomarle importancia al tema. La verdad me daba cargo de conciencia saber que estaba botando cosas a la basura que podían tener otro uso”. Ambas llegan a la conclusión que la sociedad chilena ha progresado en el uso de los plásticos, existiendo una mayor consciencia acerca del reciclaje y valorando más los productos de origen sustentable. “Actualmente, hay muchos centros de reciclaje, campañas, puntos verdes y más personas preocupándose de reciclar. Al menos desde los consumidores se nota un esfuerzo mayor por reciclar”, comenta Constanza. Sobre esto último, Diego González, dueño de la cafetería Casa Negra, comenta que siente una respuesta positiva de sus compradores a sus productos e iniciativas sustentables. “Intentamos incentivar a la clientela a que lleven sus vasos para no usar desechables y varios lo hacen”, afirma González. Además, como emprendimiento, menciona que “el compromiso con el planeta es una parte fundamental de nuestro negocio. Utilizamos solo un 20 % de plásticos, optando sobre todo en empaques compostables”. Más regulación El pasado 13 de febrero entró en vigencia la primera fase de la Ley 21.368, la que limitar los plásticos de un solo uso en los establecimientos de expendio de alimentos, prohibiendo la entrega de bombillas, cubiertos y artículos de plumavit. Además, dentro de la normativa se fomenta la reutilización y la certificación de este material en los próximos tres años y se regulan las botellas plásticas desechables. Hoy las personas tienen más interés por reciclar. Foto de Julio Lopez en Unsplash. “La puesta en marcha de esta ley, una de las más ambiciosas del mundo para combatir la contaminación por el uso indiscriminado de plásticos. Esta legislación implica un profundo cambio de hábitos, tanto para los locales que venden comida como para la ciudadanía”, explicó en su momento Marcelo Fernández, exministro del Medio Ambiente. Aún falta Pese a todos los avances que está teniendo Chile, un futuro sustentable se ve lejano aún. Por un lado, los plásticos siguen igual de presentes. “Aunque ya no den bolsas para guardar las cosas, todos los alimentos vienen envueltos en materiales no reciclables”, comenta Marlene. Por otro lado, existe un gran desconocimiento por parte de la población en el tema del reciclaje. “Surgen las iniciativas, pero no vienen de la mano con la educación. La gente que no lo hace, no solo es por flojera, sino que en gran porcentaje porque no sabe”, dice Constanza. Es entonces que existen muchos ámbitos que aún faltan por ver y que no se han considerado dentro del panorama de sustentabilidad en Chile.