Un enemigo crucial: la desinformación como barrera entre la Convención Constituyente y la ciudadanía Entrelíneas por Sebastián Arias Cortés - 18 abril, 202219 abril, 20220 El órgano que redacta la nueva carta magna se ha visto enfrascado en una compleja batalla contra las fake news, muchas de ellas que se difunden sin cautela en redes sociales. Desde el inicio de los funcionamientos de la Convención Constituyente ha existido una fuerte tendencia por desinformar a la ciudadanía, de forma directa o indirecta. Con los medios de comunicación como canales pasivos o las redes sociales como libertinaje de malintenciones, este problema no cesa y su impacto es crítico en la sociedad. Hace algunas semanas el foco recayó en el convencional de derecha Bernardo Fontaine luego de los dichos que lo llevaron a la portada de LUN, donde habló sobre la propuesta de NO+AFP. El economista afirmó que los trabajadores y trabajadoras no iban a ser dueños de sus ahorros previsionales, lo que fue derechamente rechazado por sus pares, quienes lo tildaron de “irresponsable”. Tras este hecho, la presidenta María Elisa Quinteros envió una carta a sus colegas haciendo el llamado a velar por el principio de veracidad y evitar desinformar a la ciudadanía. Con esta petición, algunos convencionales de derecha criticaron el actuar de Quinteros, indicando que con esto se busca empezar una “censura”. Es un hecho que las fake news son el principal enemigo de quienes trabajan en el área actualmente, por lo que llama la atención el cómo se desenvuelve esto y la manera en que afecta a la imagen del órgano constituyente. Las últimas encuestas arrojan resultados negativos en la apreciación del trabajo de la Convención Constituyente. Fotografía: AFP. La complejidad de la sobreinformación Con respecto a la difusión de noticias falsas en torno a la Convención Constituyente, hace unos días se conoció el resultado de una encuesta publicada por “Datavoz”. De las personas que respondieron, un 58% manifestó conocer información que terminó siendo falsa, mayoritariamente a través de redes sociales. Esto es el reflejo de un constante acecho de las fake news alrededor de una sociedad sobrecargada de información ante sus ojos, algo que no es nuevo a estas alturas. El Doctor en Comunicación y Asesor en Transformación Digital de la Universidad Autónoma del Caribe de Colombia, Gustavo Arias Constanzo, comentó la línea que siguen estos sucesos. “La política encontró en las fake un espacio propio, entendieron que el algoritmo ayuda a buscar perfiles individuales que sean blancos fáciles para inducirlos a creer sus ideas, las que mayoritariamente son de corte popular”, señaló. El comunicador además indicó que “no se puede seguir buscando clickbait para un mayor número de likes o que esto signifique la media en la profesión para que que se pueda sostener una comunicación responsable y de calidad”. La comunicadora social y ejecutiva de cuentas en Parla, Valentina Riveros, también ve la situación con preocupación en el acontecer de la Convención. “Podríamos usar los espacios en los que nosotros nos situamos para comunicar, sea el área que sea, para contribuir a una información ética. Hay que desmentir de una forma en que la comunidad pueda entenderlo”, dijo la periodista. Se espera una mejoría en la campaña comunicacional de la CC, lo cual se verá en su difusión a través de televisión y radio según la Secretaría de Comunicaciones, Información y Transparencia. Fotografía: Agencia UNO. Las complicaciones dentro del órgano El problema no siempre pasa por las y los periodistas, esto viene de la posición en la que la sociedad desea hacer su propia realidad, sin importar los temas éticos. Es por ello que se plantea que los espacios de comunicación en torno a la CC tal vez no sean los adecuados. La Secretaría de Comunicaciones, Información y Transparencia es la que se encarga de la materia comunicacional institucional de la CC, y en ella hay ciertos puntos interesantes. Han sido tres personas quienes han estado a la cabeza de la secretaría, además de contar con un presupuesto que no es el mejor para asegurar un trabajo plenamente adecuado. Para el Constituyente por el Distrito 20, Bastián Labbé, existen mayores soluciones a la forma en que se traspasa la información a la ciudadanía, considerando los distintos estratos sociales. El hualpenino observa un patrón que se amplía al ámbito educativo, social y cultural. “Es importante la creación de espacios que permitan la verificación de la información y un mayor interés por los profesionales que componen el área con el deseo de cumplir un rol más activo para que las personas entiendan los riesgos de la desinformación y no dejarlo pasar”, declaró el activista socioambiental. Se ha sabido de castigos a convencionales, entendiendo que transgreden límites en los que la imagen del órgano constituyente se ve afectada. Riveros apunta a un mayor objetivo, en el que deben tomarse medidas más serias con los canales comunicativos en los que se mueven las fake. “Se debe sancionar a aquellos medios, plataformas o espacios donde se brinde información falsa, por ser un tremendo daño a la democracia y al tejido social. Estamos segmentando información con esto y creando realidades que no existen”, dijo la comunicadora. La Convención Constituyente se ha visto en esta problemática desde el comienzo de su trabajo, y resulta hasta repetitivo la aparición de situaciones en torno a la desinformación. El futuro se está escribiendo en una nueva carta magna con la esperanza de millones, la que se espera pueda estar finalizada sin nadar en un océano de información malintencionada.