La Ley Estadio Seguro no está funcionando hace años y su modificación ya es algo necesario.

La seguridad en los recintos deportivos parece estar en jaque, ya que en estos últimos meses los hechos de violencia han sido aún más recurrentes y peligrosos. 

La Ley de Violencia en los Estadios, muestra cada vez más la ineficiencia en el control de las barras bravas del fútbol chileno, siendo imposible ver las familias en los estadios. Los hechos de violencia se repiten y la mano dura es más bien blanda, ya que en partidos como el de La Serena vs la UC, cayó un peligroso proyectil a la cancha, pero con una simple apelación los cruzados pudieron volver a tener hinchadas en su estadio, donde nuevamente fueron violentos, golpeando a hinchas del Cacique que estaban en tribuna y además lanzaron una silla a la banca del conjunto albo, viviéndose varios momentos tensos.

Los hechos de violencia se han visto de igual forma con Colo-Colo, por ejemplo, en el último duelo del Torneo Nacional pasado, hinchas del Cacique rompieron las butacas y hubo incidentes durante casi todo el compromiso.

La Universidad de Chile, a fines del año pasado, cuando luchaban por no descender, en el compromiso ante Curicó Unido ocurrió algo muy peligroso. Cientos de hinchas de la U invadieron la cancha para encarar y agredir a sus propios jugadores luego de la derrota. Estos actos de violencia son lastimosamente muy recurrentes en la mayoría de los equipos nacionales, donde cada vez se siente menos la seguridad en el estadio.

Existiendo una ley específica para contraatacar estos hechos, es lamentable ver su nulo funcionamiento y su ineficiencia contra estos actos delictuales. La ANFP y las autoridades, en conjunto a las mismas instituciones, deben aplicar sanciones duras como la expulsión de manera permanente de estos mal llamados hinchas de los recintos deportivos e inclusive aplicar sanciones de presidio y/o grandes multas. Pareciera que estas autoridades tuvieran miedo de aplicar sanciones, ya que existen grabaciones con imágenes de espalda, con imágenes de frente e incluso hay primeros planos.

La mano dura debería aplicarse desde el minuto en que se cometan actitudes racistas, eso también aplica como acto de violencia y es una verdadera vergüenza que siga pasando en nuestro país. Es lamentable que durante años se piden sanciones duras, querellas y mínimamente que no entren más estos “hinchas” a los estadios, pero parece que la ANFP hace oídos sordos y ojos ciegos, ya que no ven todas las evidencias para parar estos actos delictuales. Si las autoridades no logran esto, es mejor que la Ley Estadio Seguro agarre sus cosas y se vaya, porque hace mucho tiempo que no funciona.