Por segundo año consecutivo, la Región del Biobío experimentó un aumento en las cifras de habitantes infectados por VIH, los que a la fecha suman más de 2.000 personas. Dicha situación ha alertado a las organizaciones de apoyo para contagiados de la zona, las que ya están tomando medidas al respecto.

Han pasado más de 30 años desde que se documentó la primera infección del Virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) en el país, y desde entonces, la lucha contra la pandemia ha traído resultados positivos en el mundo. De acuerdo al último informe de las Naciones Unidas sobre el tema, desde el 2000 a la fecha se la logrado disminuir en un 35% la cantidad anual de nuevos contagios.

Sin embargo, Chile escapa de dicha realidad. De acuerdo a las cifras entregadas por el Departamento de Estadísticas e Informaciones del Ministerio de Salud, entre el 2012 y el 2015 el número de personas infectadas que se atiende por el sistema público aumentó en un 34%, siendo el grupo comprendido entre los 20 y los 44 años el que presentó mayor número de casos.

En la región del Biobío, particularmente, el total de individuos contagiados asciende 2.000, de los que una decena corresponde a niños. A lo anterior se le suma que entre 1993 y 2014, las comunas de Concepción y Hualpén fueron las que acumularon la mayor tasa VIH a nivel país, con un total de 5,9 y 5,6 casos por cada 100 mil habitantes respectivamente.

Durante el mismo periodo, se determinó que el 87,7% de los infectados que han fallecido corresponde a hombres, y que el 53,7% de las transmisiones se debe a conductas homosexuales. En tanto, el porcentaje por comportamientos heterosexuales se mantuvo en un 29,9%, de acuerdo al último informe de la Seremi de Salud del Biobío sobre el tema.

Al respecto, Lorena Bastías, quien es la encargada del programa de VIH de la Seremi de Salud del Biobío, comentó que se encuentran trabajando en el tema en conjunto con las mesas asociativas e intersectoriales, para así nuevas estrategias para evitar el aumento de las cifras. La gestora además, destacó que paralelamente se está capacitando monitores universitarios, los que ayudarán a educar a un mayor número de personas.

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Sin embargo, la socióloga Ingrid González, quien además posee un Magíster en Salud Pública, fue enfática al señalar que las campañas estatales de los últimos años no han tenido un gran impacto en la ciudadanía, ya que que no están orientadas a la totalidad de la población de riesgo. Lo anterior, debido a que éstas dejan de lado una serie de factores como la homosexualidad, los preservativos femeninos, entre otros.

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Adicionalmente, la encargada de Orientación y Consejería de la ONG Positivamente Positivos, Marta Jara, explicó que actualmente, las campañas gubernamentales están basadas en la abstinencia y la prohibición, lo que no se ajusta a la realidad cultural de la sociedad.

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Desde la Seremi de Salud del Biobío esperan que las medidas empleadas tengan un efecto positivo en la población, a pesar de que reconocen que aún existen aspectos en los que aún se debe avanzar, como que los menores de edad puedan acceder al diagnóstico sin que se les solicite la autorización explícita de sus padres. Para ello, es necesario modificar en una primera instancia el enfoque de la ley actual.