Nunca se candidateó para representar a Santa Claus, Papa Noel o el más conocido como Viejito Pascuero. Pero los evidentes rasgos navideños de Guillermo García, empujaron a su hijo a contactar con un productor de eventos, quien le ofreció los fines de año para ceñirse el traje rojo y entregar regalos a los niños.

No es una exigencia el ‘Jojojó’ en sus presentaciones como Viejo Pascuero, mas su calidez con los niños y su capacidad de ir en busca de los más tímidos son requisitos esenciales. “¿Su barba es verdadera?” Suelen preguntarles los pequeños cuando se deleitan mirando las copiosas hebras blanquecinas que descienden por el rostro de Guillermo.

Con orgullo, el hombre de 71 años puede decir que sí: “Desde hace muchos años que uso la barba larga. Siempre entre bromas me decían que me parecía al Santa Claus. Pero mi hijo que vive en Estados Unidos decidió comunicar a un conocido de él para que yo me disfrazara”.

Luego del efectivo contacto, su hijo le compró un traje exclusivo de Viejo Pascuero, traído de Nueva York: “Los trajes que venden acá son caros y mal hechos. En cambio, en Estados Unidos son baratos y tienen muy buena calidad”. La productora vio prosperidad en las características de Guillermo y lo contrató para los eventos navideños durante diciembre.

A su edad, Guillermo lleva una vida laboriosa donde dedica sus fuerzas en una lavandería de la que es dueño junto a su esposa Nadia. Allí recibe una renta estable que depende de la eficacia del quehacer de ambos. Sin embargo, Guillermo García reconoce que el ingreso entrante por representar al histórico abuelo de rojo fundado por Coca-Cola, le sirve para comprarle regalos a su nieto y para solventar algunos gastos menores.

“El verdadero motivo por el que trabajo de viejo pascuero, es por el dinero. Veo que es el comercio el que rige actualmente esta fiesta de la Navidad y se les transmite a los niños que lo importante es recibir el regalo, más que otra cosa. Yo siempre trato de dar una palabra para fomentar el amor en familia”, reconoce Guillermo, quien se ve muchas veces en contraposición por ese pensamiento menos materialista.

EL VERDADERO SENTIDO DE LA NAVIDAD

Su esposa Nadia no está de acuerdo con el trabajo de su marido: “La Navidad es el nacimiento de Jesús y no tiene nada que ver con lo del viejo pascuero. Además esa barba le hace parecer más abuelo de lo que es”. La mujer, quien se reconoce como católica tradicional, prefiere que sean los Reyes Magos los que tengan más preponderancia que Papa Noel.

Pero Guillermo puede decir con orgullo que también ha representado a esas figuras de la fe católica. Es más, la vida de Rey Mago le ha servido como escuela para dedicarse a las labores de Papa Noel: “En la Parroquia La Ascensión es una tradición que todos los años sea uno de los reyes. Los niños de Barrio Norte se fascinan cuando les dejamos regalos. Se hace un pesebre peregrino y se pasa por las calles”.

Guillermo sabe que el sentido de la Navidad debe centrarse en la creencia que ofrece la Iglesia, sin embargo, entiende el contexto donde las empresas ofrecen diversión y esparcimiento a las familias. Por ello es que sigue dispuesto a resistir el calor bajo ese caluroso disfraz invernal, a obviar las reticencias de su esposa y a esperar esa platita que le permite regalonear a su nieto.