¿Matrimonio o Acuerdo de Unión Civil? Posturas divergentes en la diversidad sexual

Han pasado cerca de dos años desde que se aprobó el Acuerdo de Unión Civil en Chile, y sólo en 2016 se firmaron más de 7.000 acuerdos en el país, pero ¿quiénes han sido realmente beneficiados con esta ley?

Según el informe del Servicio de Registro Civil e Identificación, la mayor cantidad de personas que ocupan este beneficio en 2016, tenían entre 25 y 35 años, pero existe una diferencia en cuanto a hombres y mujeres, ya que, desde los 31 años hacia arriba, quienes más registran acuerdos firmados, son hombres. Sin embargo, las mujeres, por otro lado, acceden a este acuerdo con mayor regularidad entre los 18 y 30 años.

Pese a ello, existe una cifra declarada por el Movimiento de Liberación Homosexual, Movilh, que indica que, de los 7.000 acuerdos concretados en 2016, el 75% de ellos fueron realizados por parejas heterosexuales, quedando sólo un 25% restante de parejas lesbianas u homosexuales que han concretado este paso. No obstante, la motivación de esta ley comenzó con abrir la posibilidad de ejercer un vínculo legal entre parejas pertenecientes a la diversidad sexual, entonces, ¿por qué la mayor cantidad de uniones civiles ha sido realizada por parejas heterosexuales?

Foto de Educando en Igualdad

 Cuando hablamos de unión civil lo primero que viene a la mente es ¿qué hace la diferencia entre un acuerdo y el matrimonio? Las grandes diferencias son que, con el Acuerdo de Unión Civil no puedes:

  1. Acceder a la adopción
  2. Ser cónyuge, eres sólo conviviente, lo que limita la realización de procesos legales junto con tu pareja
  3. Acceder al Seguro Obligatorio de Accidentes Personales (Soap) de tu conviviente en caso de accidente
  4. Firmar como hombre o mujer transgénero, ya que se exige colocar tu sexo biológico en el contrato

¿Entonces cuáles son las similitudes y beneficios del Acuerdo de Unión Civil?

  1. Puedes acceder a la pensión de viudez
  2. Reconoce legalmente a las familias, lo que permite que puedan recibir la tuición de los hijos o hijas de su conviviente en caso de muerte.
  3. Regulariza la repartición patrimonial hacia los convivientes según lo estipule cada pareja
  4. Puedes deshacer el acuerdo unilateralmente y por vía legal sin contacto con quien firmaste en primera instancia
  5. Registrar como carga a tu conviviente en el sistema de salud.

 

“Es una píldora, pero es necesario”

Con respecto al último punto, registrar a tu pareja como carga en el sistema de salud, existen variaciones en las experiencias personales. Tal es el caso de Lizardo Gutiérrez y Daniel Durán, quienes conformaron una de las primeras parejas en contraer la unión en Concepción, ya que, al momento de inscribir a su conviviente (Lizardo) como carga en el sistema de salud, la Caja de Compensación y la Superintendencia de Seguridad Social, les niega la calidad de carga familiar pese a haber suscrito el Acuerdo de Unión Civil.

Lizardo Gutiérrez y Daniel Durán (de derecha a izquierda). Foto: Rayen Barriga

 

“Es claro que el Acuerdo de Unión Civil es una píldora, lo valioso que tiene, porque es una ley imperfecta, es que es una progresión cultural necesaria en Chile. En una sociedad machista y heteronormada, tremendamente influenciada por la iglesia -de todos los credos-, arriesgarse a establecer una norma legal que valide las relaciones homosexuales, automáticamente te genera un quiebre dentro del esquema de la sociedad. Es lo mismo que pasó con la ley de divorcio, donde se juraba que los fuegos del infierno caerían en Chile, nadie se iba a casar… el mismo discurso que ocurrió cuando empezaron a votar las mujeres, y así para atrás”, asegura Daniel Durán, profesor y académico de la Universidad de Concepción.

 

Ser homosexual en los años 90 en Concepción

«Nosotros somos de una generación donde en Concepción te tomaban preso por ser gay. Nos podían sacar de un restaurant si teníamos alguna muestra de cariño. Existían redadas en las discos”, comenta Lizardo, mientras que Daniel asegura -imitando- que con el alcalde de esa época “se tiene que mantener la decencia y la moral tiene que estar en el alto nivel de la ciudad”. Las redadas consistían en que, a cierta hora de la noche, llegaban los carabineros, te pedían el carnet y se llevaban a todos al calabozo.

“Yo lo conocí en una disco y de verdad que me enamoré de él. Yo tenía otra relación, Daniel igual. Lo encontré dos veces más y yo estaba feliz, de verdad, pero después no lo vi más, hasta diez años después donde dije: ya, pah, palo al tiro” menciona a risas Lizardo. Por otro lado, ambos comentan que sólo una vez pasados los 2000 comenzaron a sentirse más cómodos en Chile.

“En la actualidad nosotros sentimos que esto ya no es tema, después de varios hitos como lo de Zamudio, que pusieron el tema en el tapete. En menos de diez años Chile ha cambiado, al menos ahora en las reuniones ya no soy el bicho raro y no nos preguntan y quién es la mujer… la mujer es tu mamá jajaja. Ahora esa pregunta ya no se hace, y si se escucha ya sólo te ríes, porque ¿de verdad estás preguntando eso?”.

 

Otras formas de AUC

“Nosotros teníamos una sociedad empresarial. Antes del 2015 esta era la forma donde las parejas homosexuales podían resguardar el patrimonio, y cuando llegó el 2015 ya teníamos más que conversado hacerlo, tanto el acuerdo como adoptar” agrega Lizardo Gutiérrez.

Con respecto a la adopción, Lizardo concreta que “yo tengo 48, de hacerlo, tendría que ser ya rapidito, porque me gustaría verlo crecer, llevarlo a la universidad y no estar postrado, pero con el Acuerdo de Unión Civil no podemos. Por eso, matrimonio igualitario”.

Reacciones en el trabajo

“Cuando salimos en todos los medios de Chile por el AUC, fue tema, pero yo llegué con la frente en alto no más. y, al menos en mi facultad, después los arcoíris empezaron a salir de la puerta para afuera. O sea, se destapó el profe y salieron todos jajaja” cuenta Daniel con gracia.

 

¿Qué opinan las lesbianas frente al AUC?

En cuanto al lesbianismo, contactamos a la Agrupación Lésbica Rompiendo el Silencio, la cual nace hace 14 años como revista y medio digital. Desde el año 2013 se declaran como agrupación lésbica, y, desde ese año, trabajan en conjunto con algunas campañas estatales. Sin embargo, Daniela Contador, periodista de la agrupación, aclara que “respecto al tema institucional para el Estado aún no somos parte de la población, sino que cuando lanzan ciertas campañas de distinta índole, nosotras le hacemos el llamado de atención que las lesbianas y mujeres bisexuales no estamos incluidas en esas campañas. Recién ahí, ellos cambian su actitud”.

Foto recuperada de Agrupación Lésbica Rompiendo el silencio

En cuanto al matrimonio igualitario, Daniela comenta, que existen otras luchas más urgentes para las lesbianas, como una ley efectiva de antidiscriminación.

Derechos filiativos

Con respecto a la adopción y el reconocimiento de familias diversas el AUC no permite esta opción, pese a que era uno de los derechos fundamentales que exigían lesbianas y gays, ya que era una de las motivaciones para acceder a una ley que conformara las uniones entre la diversidad sexual. Los derechos filiativos, aparte de dar la opción de adoptar, deben garantizar el reconocimento de dos madres o dos padres en una familia, lo cual se espera sea realizado en el nuevo proyecto de ley por el matrimonio igualitario, dado que en estricto rigor, debe ofrecer los mismos derechos que un matrimonio heterosexual.

Para Daniela Contador y la Agrupación Lésbica Rompiendo el Silencio, este tipo de demandas generan diferencias, ya que este derecho debería existir sin la necesidad de estar casadas o casados.

Ley antidiscriminación

En Chile, la motivación de instaurar una ley de antidiscriminación venía desde el 2005, sin embargo nunca obtuvo la atención suficiente hasta el 27 de marzo del 2012, donde Daniel Zamudio fue asesinado por un grupo de Neonazis tras propinarle una golpiza producto de ser homosexual. El asesinato causó revuelo en la población, y fue en ese entonces que surgió con urgencia legislar ante la ley un acuerdo que protegiera a la diversidad sexual, principalmente, ya que también está enfocada a otros niveles de discriminación.

La ley 20.609 es la única instancia que existe para proteger a la diversidad sexual, pese a ello, el presente año, 2017 y el 2016, en Chile fueron asesinadas dos lesbianas, Nicole Saavedra y Susana Sanhueza. Estos femicidios motivados por el odio a su orientación sexual, no han sido investigados al menos en el caso de Nicole, siendo hoy un caso sin resolver.

Daniela, producto de lo mismo, agrega que existe una diferencia entre la visibilidad lésbica a la gay, generada por el machismo en la sociedad.

 

Por otra parte, enfocando en otros motivos por los cuales la diversidad sexual no opta por el Acuerdo de Unión Civil, recogimos diferentes opiniones en Concepción acerca de su posición ante esta ley.

 

 

Top