Hoy, las industrias creativas existentes en Chile no solo aportan a la economía nacional, sino que se desarrollan también en el extranjero, mostrando al mundo la cultura chilena. Piezas audiovisuales, juegos y comics son algunos de los productos que hoy se exportan a otros países.

Según la Unesco, las industrias creativas se definen como  “aquellos sectores de actividad organizada que tienen como objeto principal la producción o la reproducción, la promoción, la difusión y/o la comercialización de bienes, servicios y actividades de contenido cultural artístico o patrimonial”.

Bajo esta premisa es que grandes, medianas y pequeñas empresas han producido contenido y servicios para llevarlos al extranjero y mostrar al mundo lo que se produce acá. No solo son productos como el vino o el cobre.

Las industrias creativas poseen una ventaja sobre los productos exportados de forma constante en Chile, ya que los servicios son infinitos, no como los recursos que hoy se explotan en Chile. Una película, un cortometraje, un video juego o una historieta no terminan si por ejemplo se acabara alguna materia prima como un metal; estos son buenos en tiempos de crisis, ya que las personas buscan innovar para salir adelante, lo que pueden encontrar en estas fabricaciones.

Banana Kong, videojuego del estudio Gamaga, e Historia de un Oso, cortometraje realizado por la casa productora Punkrobot. Los dos, productos nacionales expuestos en el extranjero.

Para poder potenciar estos trabajos y llevarlos al extranjero una de las entidades del Estado, entre otras existentes, apoya a todas las empresas que se dediquen a este rubro a través de talleres, actividades, viajes y proyectos. Prochile es una institución dependiente del Ministerio de Relaciones Exteriores, que busca promover la exportación de bienes y servicios, apoyar la atracción de inversión extranjera y fomentar el turismo en Chile, lo que estas nuevas industrias están haciendo hoy.

Fanny González, profesional del área de las industrias creativas de esta entidad, señala que todas las medianas y pequeñas empresas tienen la capacidad de exportar, más aún las que tienen que ver con servicios, donde se incorpora el área creativa. Indicó además que estas empresas ayudan en la creación de una identidad país.

La profesional, con más de 12 años de trabajo en Prochile, también apuntó al cambio de gobierno que se espera en los próximos meses, señalando que hubo un crecimiento país de estas empresas independiente del color político que exista, por lo que “los instrumentos o focos pueden cambiar, pero el apoyo a las empresas sigue”, por lo que llamó a las empresas del rubro creativo a seguir adelante con sus proyectos.

Fanny González en el Taller de industrias creativas realizado el pasado miércoles 18 de octubre.

¿Pero existen casos exitosos en el extranjero de industrias creativas? Ya se conoce el premio Óscar obtenido por el cortometraje “Historia de un oso” y como este podemos observar la historia de Alan Robinson, ilustrador y director del actual Estudio Austral Limitada, una empresa que logró emprender gracias a su trabajo y apoyo de instituciones como Prochile.

Alan Robinson exponiendo el Taller de industrias creativas el pasado 18 de octubre.

Alan comenzó su trabajo en la narrativa gráfica enviando propuestas a distintas editoriales, nacionales, realizando trabajos para las recordadas cartas «Mitos y Leyenda» y también, luego de terminar su carrera de Diseño Gráfico, a editoriales internacionales como son Dark House y IDW Publishing. Su primer trabajo fue un cómic llamado Lost Squad, luego de presentar su portafolio en una página web llamada Digital Webbing y ser llamado por una editorial que desarrollaba cómics de la II Guerra Mundial en el año 2003. Este primer trabajo no profesional no fue remunerado directamente, sino cancelandole el derecho que debía pagar para publicar el cómic.

Sus trabajos más recientes internacionalmente han sido un cómic llamado Vwars y Volver al Futuro de Citizen Brown, entre otros muchos trabajos con editoriales de Estados Unidos y Francia. Alan cree que la ilustración se puede utilizar en todo ámbito; para menúes en restaurantes, libros de historia para niños, etc. Todos estos trabajos que ha pensado y ha realizado no han sido de forma «profesional», y fue ahí donde Prochile ayudó a Alan a profesionalizar su trabajo internacional, impulsando a Estudio Austral en el mundo.

Todo esto ha sido en base al trabajo de este profesional del diseño. Al momento de comenzar con su empresa recibió el apoyo de esta entidad que busca impulsar a industrias en el extranjero y más aún hoy a las industrias creativas, las que se encuentran el 5to sector económico más grande en términos de volúmenes de venta en Chile.

Estas entidades, como es Prochile, llama a las empresas que crean tener capacidad de exportación a participar de talleres, capacitaciones, concursos y encuentros para potenciar aún más sus productos y servicios.

                                                                     Publicaciones más destacadas de Alan Robinson durante su carrera.

¿Cómo llevar tu empresa al extranjero?

Todos los detalles de la exportación de las áreas creativas se encuentra en la Guía para el exportador de servicios creativos.