La carrera científica de diversos laboratorios farmacéuticos para desarrollar una vacuna efectiva contra el coronavirus no ha estado exenta de mitos, entre ellos, la mutación del ADN.

Pese a los progresos de la ciencia, el debate en torno a la seguridad de la vacuna, expone una dicotomía entre los férreos defensores de la inoculación de la población y aquellos escépticos que ven en ella un peligro.

Y es que, entre los múltiples mitos que circulan en Internet respecto a la vacuna, uno que destaca es la supuesta manipulación del material genético.

Mito vs ciencia

Sin embargo, ¿está fundamentada la duda ante la seguridad de la vacuna y su impacto en el ADN? Para la ciencia la respuesta es clara, No.

Vamos por partes, al vacunarse el cuerpo se expone a un patógeno inactivo ¿el objetivo? Aprender a defenderse de él sin necesidad de existir contagios.

En consecuencia, se genera un efecto protector a nivel inmunológico tras reconocer al agente invasor y atacarlo de forma efectiva. 

No obstante, pese a lo inocuo del proceso, la comunidad científica ha debido alzar la voz para frenar la difusión de noticias falsas que desinforman a la población respecto a la vacuna. Es el caso del profesor Jeffrey Almond.

El docente y microbiólogo de la Universidad de Oxford declaró que: «El inyectar ARNm a una persona no cambia nada del ADN de una célula humana».

Según lo expuesto, el material genético no se vería alterado. ¿Por qué? Dado la vacuna actúa fuera del núcleo celular, impactando el citoplasma sin penetrar el ADN.

Además, es preciso recalcar la rigurosidad de los estudios científicos al analizar las vacunas pues estas solo pueden ser administradas si no representan un peligro para la población.

Panorama nacional

En Chile la vacunación contra la COVID-19 inició el jueves 24 de diciembre tras el arribo del primer envío de la vacuna de Pfizer BioNTech.

Desde la fecha, se comenzó a inocular al personal sanitario con el fin de asegurar el óptimo funcionamiento hospitalario. Asimismo la campaña de vacunación se extenderá hacia la población de riesgo -adultos mayores y enfermos crónicos- hasta culminar con la inoculación de la población sana (entre 18 y 59 años).

Respecto a la vacuna, el Ministerio de Salud recalcó en su plataforma virtual que esta es segura. “No provoca la enfermedad denominada COVID-19. Sólo incorpora un pequeño fragmento del ARNm del virus SARS-CoV-2”.

Cabe destacar que la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19 se autorizó tras una exhaustiva evaluación para su uso en el Instituto de Salud Pública, FDA y en la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).

A modo de conclusión, no, la vacuna no mutará tu ADN ni implicará un riesgo para tu salud. Posee una eficacia de un 95% y el campo de la ciencia ha alzado la voz para desmitificar la corriente antivacunas.