Uno de los aspectos que más debate causó una vez que estalló la pandemia en nuestro país fue la actividad física. El confinamiento establecido por más de un año mermó duramente el estado de salud de las personas, por lo que muchas aprovecharon los horarios especiales establecidos y todo tipo de lugar con tal de mantenerse activos. Hoy, con menos cantidad de restricciones, vemos a las actividades de recreación regresar con cierto grado de normalidad.

Por Kathia Cancino Rojas y Christopher Cortez Alarcón

Considerada una disciplina en auge durante los últimos años, comenzó como algo muy de nicho, practicada solo por unos cuántos. Pero, lentamente fue popularizándose hasta conseguir un sinnúmero de adeptos; tanto fue así que el pasado 10 de octubre, por lo menos 300 hombres y mujeres compitieron en la primera de cuatro fechas del campeonato Ruta Costas del Maule. 

Y es que cuando hablamos del retorno del deporte luego del parón por la crisis sanitaria, hay uno que parece llevarse todas las luces. El fútbol fue el primero de aspecto colectivo en retornar a la competencia y, hace alrededor de dos meses, ha comenzado una vuelta gradual del público. Otras especialidades parecen no llamar tanto la atención de los grandes medios de comunicación, pero persiguen la normalidad pese a no contar con mayores luces.

Sebastián Keitel, diputado y miembro de la Comisión de Deportes y Recreación del Congreso Nacional, ha sido uno de los mayores defensores del rubro durante la crisis de la Covid-19. El parlamentario expresó a Radio Biobío en abril pasado que “tenemos que seguir insistiendo, es importantísimo darle espacio a los niños y adultos mayores. Están encerrados sufriendo muchísimo en su salud física y mental. Estoy luchando contra el Gobierno para hacerle entender que el deporte es una herramienta fundamental de solución para la pandemia”.

Es en ese sentido que el regreso del ciclismo, tras más de un año de inactividad a causa del contexto sanitario, se configura como un hito para la comunidad que lo practica. Sin embargo, debido a la masividad de los eventos, cabe preguntarse qué tan seguro es, no solo para los ciclistas, sino también para quienes les acompañan. 

¿Qué tan seguro es el retorno?

“Es un riesgo, la pandemia no ha terminado. Aún hay casos positivos que van al alza, por lo tanto, no se pueden dejar de tomar las medidas de protección y autocuidado”, explica Sebastián Salazar, enfermero de la Universidad Católica de la Santísima Concepción. Cabe considerar que, tan solo en el desafío Putú Pedalea, primera fecha del campeonato, asistieron aproximadamente 350 competidores, sin contar sus acompañantes. 

La tesorera del club Putú Bike, Ángela Núñez, miembro del comité organizador de dicha jornada, indica que dentro de los protocolos adoptados para la carrera se encontraban el pase de movilidad y un documento donde se dejaba constancia de no ser contacto estrecho con alguna persona contagiada. Además, ésta tuvo lugar al aire libre, en un amplio complejo turístico al que solo accedieron los corredores y sus familias. 

Al respecto, Salazar recomienda “mantener las medidas sanitarias que todos adoptamos desde el inicio de la pandemia: uso correcto de mascarilla, cubriendo nariz y boca, lavado de manos frecuente, uso de alcohol gel, distancia social de un metro, evitar el contacto físico, no compartir alimentos, bebidas, agua ni útiles de aseo y tener pase de movilidad al día con las dosis de vacuna según corresponda”. 

Además de las recomendaciones entregadas por Salazar, desde el club Putú Bike también cuentan con un registro de cada competidor en la entrada del complejo, para realizar un respectivo seguimiento en caso de que algún contendiente portase la covid-19. Sobre ello, Cristofer Morales, participante del evento, califica los protocolos de manera positiva. “Nos hicieron llenar un formulario, donde indicamos si fuimos contacto estrecho de alguien o presentamos algún síntoma al momento de llegar al lugar. Igualmente, exigían mascarilla en todo momento, donde solo te la podías sacar al instante de salir a la ruta y, una vez volvías, desde la organización te daban una nueva”. 

En el Maule preparan una nueva experiencia

El club Ruil Bike, perteneciente a Empedrado, es el organizador de la segunda fecha que lleva por nombre Desafío Cerro Name. Su presidente, Pablo Rojas, señala que “como organización haremos un registro de todas aquellas personas que ingresen al interior del recinto Complejo Deportivo Parque Agustín Quintana. Tomaremos la temperatura de cada uno e indicaremos el lugar donde se encuentra el alcohol gel. Además, se señalará que el uso de mascarilla es obligación”, lo cual va de la mano con los reglamentos establecidos en prácticamente todas estas competencias luego de la larga detención.

“El tamaño del recinto tiene un aproximado de diez hectáreas, donde se espera la presencia de, por lo menos, 300 corredores en las distintas categorías que la carrera requiere. Es difícil dar un número exacto de cuántas familias ingresarán, pero no debiéramos pasar de 700 personas en total”, cuenta, entregando más detalles del lugar de realización. 

Asimismo, Rojas explica que para esta segunda etapa contarán con ayuda de bomberos y ambulancia, lo que no sucedió en el evento inaugural del torneo. Entre los puntos que comparten ambas instancias, se encuentra en un rol protagónico el cuestionario de ingreso covid-19, que cumple el mismo objetivo que el formulario entregado al corredor Cristofer Morales. 

Por su parte, Carlos Correa Miño, encargado del área de Deportes de la comuna de Empedrado y profesor de educación física, resalta que el protocolo sanitario es lo más difícil de lograr, porque significa tener “el registro tanto de los participantes como de la gente que acompaña. Además, debido a la alta concurrencia, hemos buscado un lugar que reúna las características necesarias”, agrega, haciendo alusión al espacio abierto donde se realizará la actividad bajo la atenta mirada del municipio.

La necesidad de volver a las pistas 

El sentimiento de alegría es compartido. Todos quienes forman parte del mundo del ciclismo esperaban con ansias el reencuentro con las competencias que, además de masivas, se transformaban en una instancia familiar, principalmente, al momento de la premiación.  

Para el presidente de Ruil Bike, la posibilidad de ser parte del campeonato les llena de emoción, sobre todo porque “como organización nos hacemos conocidos comunal, regional y, por qué no decirlo, nacionalmente, y a su vez damos a conocer nuestra comuna ya que esta actividad es un bien común para todos los involucrados, fortaleciendo la actividad física hacia todas y todos, especialmente a los niños y niñas”, festeja. 

En la misma línea, Ángela Núñez se suma a las palabras de Rojas, evaluando el alto rendimiento de los participantes en el desafío Putú Pedalea, pese a estar más de un año fuera de las carreras. Tal y como lo comentaba el diputado Sebastián Keitel, el deporte ayuda a la salud física y mental de niños, adolescentes, adultos y adultos mayores. 

Es por ello que, señalar que se siente un chispazo por dentro al momento de competir no, es una locura. El ciclista, Cristofer Morales, reconoció que su preparación fue larga, y que la emoción “se lo comía por dentro”. “Fue una especie de experimento que salió bien, porque llegué cuarto en mi categoría y octavo entre todos los hombres del medio desafío”, destaca. 

De hecho, Correa Miño valora que “volver a las competencias para la comunidad del ciclismo es algo primordial, porque trae consigo varias cosas como competir y medir sus rendimientos”. De la misma manera que es importante desde el punto de vista corporal, también lo es desde el lado anímico. Al respecto, agrega que “esto es sumamente significativo, sobre todo por el lado psicológico que afectó el encierro, ya que estos espacios de entretención y competición son un panorama para la familia ciclista”, en concordancia con lo planteado por los demás protagonistas de este reportaje.

Como bien sabemos, la disminución de los casos activos y fallecimientos en el país no debe entenderse como sinónimo de relajo. En adherencia con el proceso de vacunación, los cuidados personales son sumamente relevantes para asegurar la continuidad de este y otro tipo de eventos masivos. “La normalidad como la conocíamos está lejos de volver, pero sí se podrían realizar actividades deportivas tomando todas las medidas de seguridad: aforo seguro, medidas de autocuidado, distancia social, entre otras. Es importante el compromiso de cada persona para seguir avanzando en la disminución de los contagios”, concluye Sebastián Salazar.