La primera vez que el mundo escuchó el cuarto álbum de estudio de la princesa del country por allá en 2012, nadie habría podido vaticinar que terminaría convertido en un clásico moderno cuyo éxito le daría una segunda vida útil nueve años después.

“El amor es un juego despiadado, a no ser que lo juegues bien y correctamente”; así da la bienvenida Taylor Swift en “State of Grace”, el himno que abre a lo grande un relato de catarsis y transición. La cantautora tenía 22 años para el estreno de “Red” y se aventuraba a hacer sus primeros coqueteos con el pop luego de una aclamada y prometedora carrera en el country. Esta jugada, para entonces, le significó varios reproches y cuestionamientos tanto del público como de la prensa; sin embargo, el álbum llegó a ser nominado al Grammy, vender más de un millón de copias tan solo en su primera semana y producir éxitos como “We Are Never Ever Getting Back Together” y “I Knew You Were Trouble”.

El 12 de noviembre de 2021, a casi una década de su lanzamiento original, Swift publicó la nueva versión de “Red” con una serie de sorpresas como ocho canciones inéditas y una edición extendida de “All Too Well”, tema que los fans venían pidiendo por años. El hito se enmarca dentro de la batalla de la cantautora por recuperar los derechos de su catálogo musical, los cuales fueron vendidos por su antigua disquera al manager de Justin Bieber y conocido enemigo de la artista. En resumidas cuentas, el contrato que Taylor firmó al ingresar a su primera casa discográfica cedía por completo la propiedad de sus canciones a la empresa; no obstante, al tratarse de la compositora de cada uno de sus temas, cuenta con autorización legal para grabarlos nuevamente.

Es primera vez en la historia que un artista logra retomar tan exitosamente el control de su música tras un incidente de compra y venta de derechos, pues algunos casos antiguos y de íconos como Prince y The Beatles definitivamente no corrieron la misma suerte. Sin embargo, el furor por el lanzamiento del nuevo “Red”, que batió récords de reproducciones en Spotify, no es únicamente atribuible al estrellato y leal fanaticada de Swift. El tiempo ha hecho justicia con un trabajo que captura la esencia más natural y reconocible de la cantante: sus letras de desamor e incursión en diversos géneros musicales. 

Un corazón roto, la transición a la adultez, bufandas perdidas y nostalgia. “Red (Taylor’s version)” es una travesía musical tan conmovedora como divertida, apta para todo aquel que abra su corazón a recordar su primer amor  y hacer propia la poesía de Taylor Swift.