Los huecos en el sistema que debería proteger nuestros datos EntrelíneasPor Marcelo Sotomayor - 16 mayo, 2022 La constitución asegura la protección de los datos de todos los chilenos, pero muchas veces la legislatura actual se queda corta y los expertos apuntan a la nueva constitución como la punta de lanza para una nueva normativa mucho más amplia. El pasado 27 de abril sucedió una filtración masiva de los datos del padrón electoral que estaba registrado para las elecciones municipales del año pasado. Esos datos fueron expuestos en la página del Servel y pudieron ser descargados por cualquiera, de tal modo que se desconoce cuál fue el impacto real de esta fuga, ya que el número de personas que descargó el documento no fue registrado por el servicio electrónico de la institución. Entre los datos filtrados se encuentran el RUT, militancia política, pertenencia a pueblo originario, si votó o no en las últimas elecciones, entre otros. Este es un hecho muy grave y obligó al presidente del Servel, Andrés Tagle, a participar en una reunión telemática con el congreso para aclarar la situación. Allí explicó que se han suspendido a algunos funcionarios y que no se vio afectada la ley del voto secreto porque esa información no salió a la luz. Sin embargo, la diputada Karol Cariola fue tajante y manifestó que Tagle debería poner a disposición su cargo. Este incidente es una muestra más de la brecha que existe en la jurisprudencia con respecto a los datos personales, la cual no se aplica en este tipo de situaciones. La página nombrerutyfirma.com entrega datos extraídos del Servel, haciendo pública la identidad de millones de chilenos e incluso dando la dirección de su casa. Créditos: emol.com. ¿Para qué se utilizan los datos? Las empresas se aprovechan de los huecos en la normativa jurídica para poder extraer los datos de los usuarios. Muchas de estas compañías lo emplean con fines comerciales, tales como el uso de anuncios dirigidos a personas específicas. Para ello crean perfiles demográficos o según los intereses de los usuarios, en una técnica conocida como targeting. Este tipo de herramientas de publicidad no son necesariamente malas, pero muchas veces se realizan sin el consentimiento de los usuarios. En esto último es donde destacan las redes sociales y gigantes tecnológicos como Facebook, Twitter o Google. El caso del primero es el más sonado, pues mediante este servicio es que se han realizado algunos de los mayores escándalos de este tipo. En esto resalta Cambridge Analytica, empresa que, aprovechándose de que nadie lee los términos y condiciones, usó juegos y aplicaciones dentro de Facebook para acceder no solo a la información de los usuarios que aceptaron los términos, sino también de sus amigos en la plataforma. Esta información luego fue vendida a la campaña del entonces candidato Donald Trump, quien efectuó una importante campaña en el sitio web por medio de esa información. En 2017, Facebook recompensó con datos personales de los usuarios a Amazon luego de que esta invirtiera en publicidad en el sitio. Créditos: dinero.hn. ¿En qué falla Chile? La situación de los datos personales en nuestro país es un tema que preocupa a distintos sectores. Danielle Zaror Miralles, quien es investigadora en el Centro de Derecho Informático de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, señala que “resulta prioritario avanzar en la regulación de la protección de los datos personales, que en el caso de Chile lleva más de 14 años en el congreso y que tiene a Chile bastante rezagado en comparación con otros países de la región”. Además de esto, también es relevante mencionar las bajas penas que determina la ley para este tipo de delitos, con un máximo de 50 UTM, es decir, menos de 3 millones de pesos, monto irrisorio para una gran empresa. En Europa la situación de los datos personales está mucho más avanzada que en nuestro país, como explica la investigadora, “la situación entre Chile y Europa es abismal, no hay puntos de comparación, mientras en el viejo continente son pioneros en regulaciones como el reglamento europeo de protección de datos, o la regulación sobre mercado digital o de servicios digitales, aquí en Chile se está básicamente de espectador porque ni siquiera hay agencias gubernamentales en condiciones de implementar buenas prácticas”. Esta misma protección es la que tiene en jaque a Facebook en ese sector, pues la Unión Europea se ha mostrado en contra de las políticas de Zuckerberg, lo que destruiría el modelo de negocio de la red social. También menciona que hay que esperar hasta el plebiscito de salida del 4 de septiembre para poder determinar cuál será el futuro de los datos personales en Chile, pues ese día se determinará si se creará una agencia con autonomía constitucional que verdaderamente vele por este tema, pues de momento solo se puede esperar que el aparato legislador ponga en marcha esta iniciativa.