El Rechazo y su defectuosa estrategia

El momento de la verdad ha llegado, las fuerzas políticas y sus engranajes propagandísticos se encuentran a plena potencia. La carrera comunicacional ha comenzado, pero uno de los participantes pareciera estar cojeando.

Es cierto que el rechazo sigue manteniéndose -por poco- como la opción predominante en las encuestas, una situación esperable tras un proceso constituyente lleno de polémicas y demostraciones de poca seriedad. Lo peculiar de esta situación, considerando los múltiples traspiés del gobierno y los constituyentes, es que la opción del Apruebo continúa ganando terreno en las preferencias de la ciudadanía.

Los recientes sondeos de Cadem y Cepal han concluido que el principal motivo del rechazo al borrador resulta ser la desconfianza en los constituyentes. El problema recae en que la razón de fondo no se encuentra en la misma carta magna, sino en aquellos que la redactaron. Ahora que la mayoría se encuentran relativamente alejados del constante escrutinio público, resulta inútil utilizar sus acciones como propaganda para el Rechazo.

Otro punto flaco en la campaña resulta ser la divulgación de fake news y descalificaciones tales como el caso de la diputada Paula Labra (RN), quien afirmó que el himno nacional iba a ser modificado mientras asistía a la cuenta pública, o Felipe Kast (Evópoli) compartiendo un supuesto video exhibiendo el apoyo de Nicolás Maduro al borrador constitucional. Este material hacía referencia a unas declaraciones del año 2020, en donde el dictador manifestaba su apoyo al proceso, mas no al resultado final ya que no estaba disponible en ese entonces.

Marcha por el rechazo en el primer plebiscitó. Gentileza El Mostrador.

Las comparaciones e intentos de relacionar estos procesos con dictaduras, además de fracasar categóricamente en los procesos democráticos anteriores, sólo los hace quedar como un conjunto paranoico. El ejemplo más claro de esta paranoia resulta el intento de deslegitimar las votaciones por parte del controvertido Francisco Muñoz en su visita al Servel, estrategia que tampoco les funcionó a los seguidores de Keiko Fujimori y Donald Trump.

Las consecutivas derrotas en las elecciones presidenciales y el plebiscito deberían ser la prueba suficiente para la derecha chilena de que estas estrategias no son efectivas. Si realmente desean ganar contra el Apruebo deben enfocarse en realizar críticas reales. Es necesario un enfoque diferente, se requieren con urgencia diferentes rostros con ideas renovadas y mientras eso no sea así, esta situación no será diferente a las anteriores instancias de participación ciudadana.

Por ahora, la mejor propaganda para el Apruebo continúa siendo la campaña del Rechazo.

Marcelo Vega Montenegro
Estudiante de periodismo en la Udec.
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