El alza en el precio de los alimentos y su repercusión en las fundaciones benéficas

La repercusión de los problemas que ocurren a nivel nacional e internacional ha afectado gravemente el bolsillo de los chilenos, en especial a las personas con más escasos recursos, aumentando la vulnerabilidad de varias familias en nuestro país.

En un año en que somos testigos del fuerte incremento del valor de la canasta básica de alimentos al momento de realizar las compras del mes en los supermercados de cadena o de barrio. Así como también al momento de pagar las cuentas de la luz y agua o al reabastecerse de servicios básicos como gas, petróleo, bencina, tan necesarios durante este frío invierno.

Estas problemáticas para obtener todos los recursos se ven fuertemente reflejadas en las fundaciones benéficas que muchas veces dependen mayoritariamente de la financiación de privados para mantenerse.

Así lo explica, Jonas Garrido, supervisor de captación de Fundación Las Rosas, Región Biobío y Ñuble: “El mayor costo que nos está afectando hoy en día es el de calefacción de nuestros hogares, ya que los 28 hogares a nivel nacional cuentan con calefacción central, esta calefacción es por gas, el cual significa un 27% de los ingresos”, comentó.

Desde la Fundación advierten que las bajas temperaturas traen aparejadas posibles complicaciones, que en el caso de las personas mayores, ya afectadas por dos años de pandemia y la fragilidad asociada a su edad, resultan doblemente peligrosos. A esto se suma la necesidad de contar con una alimentación adecuada, con alto valor nutricional para enfrentar el frío, la humedad y los eventuales días de lluvia de estos meses.

Las personas mayores son las mas necesitadas durante el invierno. Imagen cedida por antofagastanoticias.cl

La Fundación Las Rosas acoge a 2.000 personas mayores desvalidas, por lo que han tenido que recurrir a realizar campañas de donaciones online, en redes sociales y en la prensa para seguir entregando los cuidados básicos, alimentación y poder calefaccionar adecuadamente sus hogares.

“Nosotros ocupamos aproximadamente 500 mil pesos semanales en cada hogar, nuestro ingreso es por donaciones de privados, amigos de la fundación (socios) y personas naturales que hacen aportes que significa el 62% de nuestros ingresos”, explicó Garrido.

Además agregó que ha sido un 20% la elevación de todos los gastos operacionales, por lo que sus socios tienen que aumentar los aportes.

Seguridad alimentaria

Según el Ministerio de Desarrollo social la canasta básica de alimentos aumentó un 17% en un año, un 87% de los productos subió en el mes de mayo.

Parte de esta problemática detalló también Enrique, residente de la fundación Bonhomía, donde explicó que si bien, las personas que habitan allí no tienen mucha conciencia de lo que ocurre en los temas de financiación, si se ha dado cuenta de que ha bajado la preparación de algunos alimentos como la carne.

En la misma línea, Daniela Sánchez, jefa territorial del Hogar de Cristo en Concepción comentó en el Diario Concepción que “el alza de precio del pan, al igual que otros productos de necesidad básica, ha impactado fuertemente el bolsillo de la fundación. Se han elevado mucho los costos de la operación social y eso lo hemos visto reflejado en las familias que ayudamos”, explicó.

Tanto las ferias como los supermercados han incrementado los precios de los alimentos. Imagen cedida por vallesdelsol.cl

En otras palabras, la seguridad alimentaria de las personas no se ve garantizada, tema en que Sánchez fundamentó que es primordial que las familias tengan un nivel básico de ingreso que permita acceder a los alimentos. Los subsidios monetarios directos e indirectos, o las asignaciones familiares ante situaciones de emergencia.

Las fundaciones hacen un llamado al gobierno a aumentar la ayuda financiera a las personas más vulnerables e invitan a la ciudadanía a participar en las campañas de donativos que realizan.

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