Tres años y un mes tuvieron que pasar para que los fanáticos de Game of Thrones se reencontraran con la clase de historia que los cautivó. La tarea de este spin-off no era fácil, ya que debía conquistar al público tras el decepcionante final de la mítica serie.

Para muchos, HBO produce las mejores series de la historia. Su reputación le precede, es cosa de nombrar Los Soprano o, sin ir muy lejos en el tiempo, la galardonada Succession. Sin embargo, hay una que marcó un precedente en un tiempo donde se hizo un clásico hacer una maratón de las temporadas completas de un programa.

Juego de tronos juntaba a personas de todo el planeta domingo a domingo, pero cuando terminó, dejó una pregunta en el aire: ¿existirá un fenómeno así otra vez? La respuesta no tardó demasiado en llegar, y parece que solo podía traerla consigo un producto sacado del mismo George R. R. Martin, que publicó en 2018 el libro Fuego y sangre.

Situada 172 antes de Daenerys Targaryen, La casa del dragón cuenta uno de los sucesos más trágicos que vivió esta dinastía, en donde la sucesión al trono llevó a una guerra civil cuando más estable parecía estar Poniente. 

Con Paddy Considine (Viserys Targaryen), Milly Alcock y Emma D’Arcy (ambas Rhaenyra Targaryen), Matt Smith (Daemon Targaryen), Emily Carey y Olivia Cooke (ambas Alicent Hightower, esta precuela lleva toda la imprenta de GOT. Artimañas familiares y políticas, traiciones y lealtades, personajes grises y dragones, que pese a no aparecer tanto como se preveía, prometen tener más protagonismo en las siguientes temporadas.

Así, las expectativas se empezaron a cumplir desde el inicio, y es que la primera escena que impactó a la audiencia no tardó ni siquiera 15 minutos en suceder, dejando volar la imaginación, tanto de aquellos que ya sabían lo que se venía, como de las personas que esperaban volver a sentir lo provocado por la serie que tuvo a personajes tan icónicos como Jon Snow, Tyrion Lannister o Arya Stark.

De aquí en adelante, Ryan Condal y Miguel Sapochnik, showrunners de la producción, atraparon semana a semana incluso a quienes no estaban familiarizados con este universo. Todo con la supervisión del propio Martin, quien expresó lo satisfecho que está con lo logrado, reconociendo incluso a uno de los personajes como superior al escrito por él.

Pese a los grandes números que logró House of the Dragon, hubo decisiones narrativas que no dejaron muy satisfechos al público, dejando así algunas dudas. Sin embargo, el logro de volver a reunir a las personas está siendo reconocido mundialmente. ¿Qué depara el futuro? Lo sabremos en 2024.