Secretos familiares y realismo mágico en “What remain of Edith Finch

El título de 2017 llegará a las consolas de nueva generación en una edición remasterizada con gráficos y rendimiento mejorados, permitiendo a nuevos jugadores descubrir los misterios que esconde la entrega de Giant Sparrow.

Los walking simulator son una categoría muy especial en los videojuegos, pues se ven enfrentados a la esencia misma del medio. Como su nombre indica, estos consisten principalmente en andar a través de un escenario, por lo general lineal, donde hay poca o nula interacción entre el jugador y el entorno. Este nombre nació como una burla a este tipo de experiencias, al considerarlos inferiores a otros videojuegos más tradicionales, pese a esto, este género ha acabado encontrando un hueco dentro de la industria y entre ellos hay títulos que han logrado crear aventuras que de otro modo no funcionarían de la misma forma.

What remain of Edith Finch es uno de estos. En este juego tomamos el papel de Edith, una joven que busca reencontrarse con la antigua casa de su familia y donde vivieron muchos miembros de esta. Aquí buscaremos reconstruir su árbol familiar en su diario y descubrir aquellos secretos que sus padres buscaban olvidar al ir conociendo esta gigantesca mansión en medio de una isla solitaria.

Los escenarios permiten reconstruir la personalidad de los personajes y la historia de la casa. Créditos: gamespot.com.

Este juego toma conceptos clave del realismo mágico, siendo Gabriel García Márquez y su obra Cien años de soledad las principales influencias en este juego. Podemos trazar paralelismos bastante obvios, como la familia donde los miembros están destinados a la ruina o el lugar misterioso donde ocurre todo. El juego no busca esconder este hecho, ya que en entre los muchos libros que se encuentran en las librerías de la mansión podemos apreciar la versión en inglés del clásico latinoamericano.

Sin duda alguna, lo mejor del apartado jugable es su habilidad de transmitirnos la sensación de los personajes, en especial en los segmentos donde controlamos a los miembros que conforman la familia de la protagonista, donde pasamos desde lo alienante de la rutina en una fábrica a lo onírico y espiritual en la secuencia donde encarnamos un gato. Todos estos momentos se juegan de manera distinta entre sí, siendo secuencias separadas que representan cosas como la identidad, vida o los trastornos que aquejaron a los que habitaban esa casa.

La historia completa no es muy larga, pues solo toma alrededor de dos horas completar el recorrido a través de la casa y el juego tampoco está hecho para durar más. Es una obra sencilla y concreta, pero con muchas cosas que contar y que logra su cometido de dejar huella en los jugadores.

Top