Accidentes aéreos: Más allá de la ingeniería

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Desde que el hombre comenzó a surcar los cielos, no todo ha sido color de rosas. Los accidentes aéreos son una constante amenaza, que, si bien han ido disminuyendo con el tiempo, es un factor para tomar en cuenta. Películas como “Sociedad de la Nieve” o “El Vuelo” han hecho que exista una sensación de que una tragedia puede suceder en cualquier momento. Sin embargo, según flight talk, un podcast que se especializa en aviación, señala que en el 2022 se registraron cinco accidentes de un total de 32,2 millones de vuelos, lo cual es una probabilidad baja de accidente.

La seguridad como prioridad.

Los accidentes aéreos se consideran desde que despega el avión hasta que aterriza. Gran parte de estas desgracias han hecho que haya mejoras significativas en materia de seguridad y navegación dentro del ámbito de la aviación. Esto principalmente a que existe una investigación exhaustiva por parte de las autoridades pertinentes en conocer las causas de estas. Normalmente la existencia de las denominadas “cajas negras” determina qué clase de falla existió en la aeronave, ya sea humana, mantenimiento u otro factor.

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Estos siniestros permiten que exista un mayor progreso en torno a la seguridad que existe hoy en día, esto gracias a las investigaciones que existen, han hecho que la ingeniería y la mecánica se desarrolle de forma positiva. Principalmente mejorando los sistemas de navegación y comunicación, los cuales también son un factor clave en este contexto.

Factores de un accidente aéreo.

Cabe destacar que en general los accidentes repasados se dieron por errores humanos, al menos esa es la tónica de gran parte de los siniestros registrados. Debido a que en términos mecánicos hoy las probabilidades de sufrir una desgracia de este calibre son bastante bajas. En este 2024 solo se ha registrado un accidente aéreo en Japón, con cinco víctimas fatales. El 2023 según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA por sus siglas en inglés), fue el año más seguro para volar, debido a que no se registraron desgracias en vuelos comerciales con víctimas fatales.

Otro factor para considerar son las condiciones meteorológicas adversas, que juegan un rol clave en los accidentes aéreos, principalmente debido a que en este contexto pueden existir desde dificultades visuales, hasta complicaciones para el manejo de la aeronave.

Los accidentes transcurridos en aviaciones suelen terminar de manera sumamente fatal y es poco probable la supervivencia, pero no imposible. Existen historias como en Los Andes donde sobrevivieron 16 personas en condiciones adversas dan cuenta de que se puede sobrepasar la adversidad.

Finalmente se puede mencionar que a pesar de que estos accidentes por lo general terminan de forma fatal, estos generan un avance en materia de seguridad. Y si bien hay una sensación de incertidumbre al respecto, principalmente debido a la ficción o películas documentales de hace 50 años. No hay motivos concretos para temer volar en avión debido a que existe una baja probabilidad de accidente. Debido a que la seguridad es un factor que es primordial en la aviación y en los gobiernos que existen.

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