Una preparación que contiene cuatro ingredientes base puede ser el motivo de algún encuentro con los amigos, la cena en familia, el bajón del “carrete”, la comida en los cumpleaños e incluso obtener ganancias a través de este, por ejemplo, en los bingos o para giras de estudio. Son algunas de las ocasiones donde el completo se hace presente.

Es jueves por la tarde, casi viernes. Por ello, al acercarse el fin de semana no hay mejor plan que ir al local de comida rápida que se encuentra a pasos de la UdeC, el conocido por los universitarios; Completex y poder disfrutar de un completo, junto a una Coca-Cola clásica en botella de vidrio, siendo aquello, el resultado de un panorama que alegra mi semana.

El plato se podría definir como una comida sencilla y fácil de preparar, los colores vivos y alegres que presenta incitan a que sea necesario comerlo. El toque que entrega el aliño provoca que, al fusionar los elementos, se genere la combinación perfecta.

También, es sabido que el orden de los factores no altera el producto, pero en base a mi degustación del completo, sí influye en la mezcla de sus sabores. Dado que, el pan recién tostado con la salchicha entremedio, son los componentes principales que pueden generar sequedad al momento de consumirlos. Sin embargo, al incorporar el tomate y la palta, estos entregan la humedad que se necesita. Mientras que, en la parte superior, la inigualable mayonesa casera produce la unión de todo aquello y se convierte en la guinda de la torta.

A pesar de que existen diferentes tipos para el gusto de las personas, la esencia de este no cambia y el tradicional completo italiano lo sabe. El efecto que genera, hace que se vuelva tan querido por los chilenos y que se celebre cada 4 de mayo gracias a la cadena Dominó, la impulsora de esta actividad. No obstante, siempre es un buen momento para comer un completo.