Dentro del ámbito del deporte nacional, existen historias que trascienden las competencias y se transforman en símbolos de perseverancia y éxito. Gran hazaña de Francisca Crovetto, que la convierte en una leyenda para enmarcar en los libros de la historia deportiva chilena. Este logro no solo es la celebración de la victoria, sino que también resalta el trabajo detrás de cada entrenamiento y el impacto positivo que transmite su trayectoria.

Francisca no es ajena a los triunfos. Esta consagración hacia la medalla olímpica estuvo marcada por grandes momentos que vivió con el paso del tiempo. Desde su octavo lugar en Londres 2012 hasta el oro en los Panamericanos de Santiago 2023, demostró su potencial, que cada vez iba ascendiendo, en las diferentes competencias que disputaba con su rifle en mano. Su dedicación por el tiro skeet hizo que llevara el nombre de nuestro país a lo más alto en la tierra de Juana de Arco o Simone Veil.

Creemos que es una mujer profesional y que genera un impacto significativo sobre una disciplina que a menudo pasa muy desapercibida y que hace algún tiempo era muy criticada por autoridades por el uso de un arma. La victoria de Francisca guiará hacia nuevas instancias para innovar la práctica de este deporte.

La lista de campeones olímpicos registra un nuevo nombre. Fernando González y Nicolás Massú tienen una nueva compañera dentro del reino de los héroes deportivos de Chile. Al igual que lo hizo Marlene Ahrens en Melbourne, 1956, Francisca llevará la corona de ser el ejemplo del espíritu aguerrido de la mujer chilena. Simplemente, pasa a ser «La Dama de Oro».

Agradecemos eternamente a Francisca. La medalla de oro es la recompensa del optimismo y la perseverancia, una distinción que brillará como un faro de excelencia dentro del deporte chileno.