El biocombustible más cotizado: las dificultades en la compra del pellet EntrelíneasPor Juan Pablo González - 21 julio, 2022 Juan Pablo González La escasez de este producto ha generado largas filas en los locales comerciales, generando la preocupación de las personas que lo utilizan para la combustión en sus hogares. Como resultaría lógico este invierno ha venido acompañado de temperaturas bastante bajas, impactando directamente en los hogares de los chilenos quienes se las han tenido que ingeniar para combatir el frío. El método más común en la población para mantener el calor al interior de sus casas sigue siendo la estufa, un aparato clásico que, con los avances de la tecnología, ha adquirido variantes para que la gente tenga la opción de elegir la más acorde a sus pretensiones. Durante muchos años la estufa a leña mantuvo una muy alta predominancia con respecto a los otros tipos de calefacción, situación que actualmente ha cambiado ya que existe una nueva preferencia por parte de la comunidad. Así al menos lo afirma Víctor Saavedra, trabajador de la empresa Bosca, quien comenta lo siguiente: “Ahora mismo la gente prefiere la estufa a pellet más que la de leña, las que menos se compran son las de parafina, las de gas y las eléctricas”. Del mismo modo el encargado de servicio técnico añade que “este año bajaron un poco las ventas en general por la pandemia, la falta de materia prima y el quiebre de stock en algunos productos”. Los motivos de la inclinación Esta predilección por el biocombustible confeccionado a base de madera tiene diversas causas, donde los expertos destacan principalmente que la contaminación provocada es menor a la de otros productos, además de que los aparatos que funcionan a pellet suelen ser más prácticos para el uso humano. Este invierno ha estado marcado por las lluvias y las bajas temperaturas, incluso zonas de La Araucanía alcanzaron los -15 °C. (Fotografía: Agencia Uno). Lo anterior lo explica Oscar Farías, profesor jefe de la carrera de Ingeniería Civil Mecánica en la Universidad de Concepción, quien hizo las siguientes declaraciones: “Las estufas a pellets tienen la ventaja de un mayor control automático que genera una combustión más homogénea que las estufas a leña”. “Actualmente, al igual que los artefactos a gas y combustibles líquidos, las estufas a leña y pellets comercializadas en el país deben ser certificadas por organismos autorizados en términos de eficiencia, seguridad y emisiones de material particulado”, complementó el entrevistado. A pesar de las ventajas descritas, Farías también mencionó que “aún queda el vacío en la legislación sobre la regulación de estos biocombustibles, normativa que aún no se resuelve en el Congreso”, por lo que el favoritismo de la población hacia este producto se podría modificar ante alguna modificación legal que pudiese surgir. Otro de los factores que ha determinado que este sea el combustible de biomasa más solicitado en la actualidad es su precio, uno que, lamentablemente para quienes lo compran, podría incrementar debido a los hechos más recientes. Se llama a la calma La empresa Ecomas, una de las principales distribuidoras de pellet en el país, realizó un comunicado donde confirmó la escasez en la materia prima de la industria, señalando causas como el complejo contexto de los mercados internacionales y la poca demanda de los productos forestales. Esto desembocó en que distintas sucursales recibieran una gran cantidad de personas, quienes ante el desabastecimiento concurrieron a comprar el biocombustible para, posteriormente, acusar que se encontraba a un precio mucho más elevado de lo común en algunos puntos específicos. Desde la Asociación Chilena de Biomasa afirmaron que existe una disminución del 18 % en el abastecimiento de pellet. (Fotografía: Pixaby). Toda la situación obligó a que el Gobierno se manifestara indicando que aún hay presencia de stock, pero solicitando a la comunidad que tuvieran un consumo responsable y que evitaran el acaparamiento del producto. A pesar de lo complejo del caso, actualmente las ciudades mas afectadas por esta problemática corresponden a Osorno y Valdivia, lo que hace dudar sobre si la Región del Biobío se verá afectada por esto o no. Carolina Monrroy, periodista de la Seremi de Energía, afirma que “esto no debería pasar, las empresas han mantenido sus precios e incluso Ecomas aseguró que ellos no los subirán, pero al ser un mercado no regulado hay especuladores o revendedores que se aprovechan de esta situación”. A pesar de ello, la funcionaria del órgano estatal no descartó que se realizara un llamado a no acumular el producto, mencionando que “es viable para informar y concientizar a la ciudadanía”. Finalmente, Monrroy destacó que el pellet no es un combustible regulado, por lo que el Ministerio de Energía no tiene las facultades para administrar su calidad y funcionamiento en el mercado. De esta manera parece ser que el proyecto de ley que busca regularizar la presencia del pellet como otra fuente de energía será vital en el uso de este biocombustible, uno que cada año parece hacerse más presente en la sociedad chilena y que actualmente está siendo muy solicitado por la población.