Un viaje por la evolución artística de Kuina en su álbum En el cielo viven los serafines, donde la melancolía y la nostalgia se encuentran en cada melodía.

Supe de la Kuina por primera vez hace varios años, por una artista que me gustaba, que siempre subía fotos con ella, la Akriila. Recién había lanzado su primer EP, Konejo di plata, que llamó mi atención de inmediato por su estética y propuesta artística. Sin embargo, no me gustó mucho el estilo de trap que encontré en sus canciones, quizás porque en ese momento tenía la mente más cerrada. Con el tiempo, la artista lanzó En el cielo viven los serafines, álbum que me encantó de una forma muy personal. Noté un cambio en el ritmo de su música, era mucho más tranquila y transmitía más sensibilidad al cantar.

El primer tema es Temuko, el cual es bastante íntimo, pues habla de ella y su camino al emprender un cambio importante en su vida, al igual que la mayoría de las canciones del álbum. Continúa con Lorena, canción que hace referencia a su familia y los problemas que pueden existir en ella. Kuina descarga en su letra sus emociones al respecto, te lleva a pensar en el querer volver a casa y extrañar. Luego nos encontramos con la primera colaboración, A los dieciséis, junto a Valentina B. Esta habla sobre el primer amor, desde dos perspectivas contrarias, una siendo interpretada por la Kuina, que parece ser más masculina y terca, pero sigue siendo romántica, junto a la de Valentina, que se demuestra más sensible y suave.

La canción que sigue, titulada Demencia, es la que me pareció más interesante musicalmente. La pista te hace sentirte atrapado con la melodía y te transporta justamente a lo que la artista quiere transmitir en su canción, pensamientos intrusivos, recuerdos borrosos, confusión y la futura demencia de la vejez que nos espera. El álbum termina con mi canción favorita, Malandrillo. Kuina señaló que la canción está escrita desde la perspectiva de un hombre que ama mucho, pero no sabe hacerlo y daña a los demás. La letra y la melodía resultan tristes, por eso me fue muy fácil identificarme con ella.

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