Teletrabajo: Las dos caras de la moneda SociedadPor Natalia Medina Contreras - 25 octubre, 2024 El trabajo a distancia llegó para quedarse, es importante conocer cada arista al respecto y no sobre pasar los límites personales. Principalmente, fue a causa de una pandemia mundial que la mayoría de los trabajos se vieron obligados a la modalidad remota. Fue un choque cultural para muchos, sobre todo personas con poco conocimiento tecnológico, por lo que hubo que adaptarse y equiparse completamente para las jornadas de productividad. Cada persona vive una realidad social distinta, lo que incomodó y complicó la comodidad del trabajo desde casa. Quienes debían compartir el mismo internet para varias conexiones a la vez, se vieron afectados negativamente en la calidad de trabajo. Modalidad mixta Catalina Aguayo es personal técnico en un proyecto de investigación para el Departamento de Psiquiatría y Salud Mental en la Universidad de Concepción. Es un trabajo que utiliza una modalidad semipresencial, tiene jornadas presenciales que le permiten, a cierto punto, separar los espacios de trabajo de lo personal, a excepción de que debe mantenerse atenta al celular en caso de cualquier situación que pueda ocurrirles a las personas a su cargo. Las capacitaciones que realiza a raíz del proyecto son de manera telemática, si bien lo considera una comodidad, a veces se estanca por la baja calidad de internet del personal que se encuentra en dicha capacitación, lo que afecta negativamente en ellas. “Salí hace poco de la Universidad, y no es mal método de trabajo, porque puedo ir especializándome en mi profesión al mismo tiempo que trabajo, y voy generando experiencia, puedo hacer diplomados y cursos para complementar mi área”, destacó. La modalidad híbrida se mantuvo tras la pandemia, ya que facilitó tanto a empresas como a empleados el desarrollo de un trabajo con flexibilidades que no afectarían en la producción. En el caso de las empresas más pequeñas, significó también un ahorro en cuanto a arriendo de oficinas, pagos de alimentación, transporte y otros. Ley de Teletrabajo Este modo de trabajo obligó una modificación al Código del Trabajo, además de regular legalmente la modalidad, considera puntos importantes al momento de prestar servicios trabajando a distancia, como el derecho a la desconexión, que permite no responder ni prestar atención a medios de comunicación laborales que sigan funcionando luego de terminada la jornada laboral. Imagen de LaTercera.cl Alexis Salinas utiliza la modalidad de teletrabajo en Inversiones S&M S.A. Una empresa de servicios de seguridad privada, aseo y servicios generales. Destaca un punto esencial que se pierde por esta modalidad, que es la identidad, cada vez se siente menos parte de la empresa, cosa que aún no afecta en su compromiso con ella, pero es importante mejorar. Además, Alexis habla sobre la importancia de respetar los espacios: “me costó poner límites al horario laboral, por lo que, finalmente, mi tiempo libre en práctica, no existía. No lograba desconectarme del trabajo y convertí parte de mi dormitorio en oficina, siempre estaba en el lugar de trabajo. Eso me pasó la cuenta”, destacó. Una oportunidad para seguir avanzando Felipe García actualmente es Ingeniero en Construcción y durante 2022 teletrabajó en una empresa como Técnico en Construcción mientras sacaba la ingeniería, al respecto comentó que “esta modalidad fue de gran ayuda para seguir estudiando, con mi pareja decidimos irnos a vivir juntos y era necesario el ingreso de mi parte, tanto para el hogar como los estudios, por lo que en las tardes iba al instituto y durante el día cumplía con mi horario laboral y quehaceres en casa”. La salud mental en juego Tanto para quienes teletrabajaron en pandemia, como para quienes estudiaban en ese momento, la salud mental estuvo presente como factor determinante en cuanto a carga laboral y estudiantil. La soledad a muchos les jugó en contra y Felipe no fue la excepción. Imagen es de Cibernos. “Hay puntos en contra más allá de lo económico y laboral, que es lo social. Siempre he sido una persona muy activa y habladora, después de la pandemia siento que me volví algo antisocial. Me cuesta mucho relacionarme en el trabajo y la mayoría de mis amistades son a través de una pantalla. Me incomodan mucho las multitudes y grupo de gente, tanto que me es imposible subir a un bus que se vea un poco lleno”, comentó. Hoy se ve como una facilidad de trabajo, pero es importante conocer todas las caras de la moneda antes de aceptar, apegarse a la Ley de Teletrabajo, conocer los límites de tiempo y capacidades y, por supuesto, mantener un equilibrio mental y social. Te puede interesa: A la caza de los químicos felices: formas de buscar felicidad