Dead boys es el refugio y reclamo de quienes han sentido cómo la depresión los mantiene entre la vida y la muerte. La canción surge por la pérdida de un amigo cercano del compositor británico Sam Fender, quien ante el dolor y la sorpresa de las altas tasas de suicidio masculino, decicidó escribir este tema.

Es una materia delicada, ya que poco se habla de la frágil salud mental y de las cosas que llevan a tomar esta drástica decisión. El artista toma estos conceptos y los vuelve música, con el fin de visibilizar lo que ya conocemos, pero que pocos se atreven a hablar.

Si lees la letra, reconocerás los guiños a las dudas y hechos sobre el bienestar emocional que están altamente estigmatizadas por la sociedad. Todo esto a través de la cómplice relación del intérprete y su guitarra, que a medida que avanza la canción va tomando un ritmo más ruidoso, para poder explicar que “todos peleamos con un perro negro, ya sea en el ruido o en el silencio” refiriéndose a las batallas personales.

El tema lo encontrarás en el álbum Hypersonic Missiles estrenado en el año 2019, escondido entre las preguntas existenciales del disco. Si alguna vez te has sentido incomprendido, en las melodías y el rock de Sam Fender podrás encontrar las respuestas que estabas buscando.

¿Quizás la instrumentación tan potente con la que termina es un llamado a la esperanza? Nunca lo sabremos. Lo que sí debes saber es que puedes pedir ayuda, que aunque no lo creas, no estás solo. 

Si estás pasando por una crisis de salud mental, tienes la opción de llamar en cualquier horario a la línea de prevención de suicidio del gobierno 4141. Yo sé cuán difícil es creerlo, pero te prometo que alguien necesita que sigas viviendo.

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