La gran tarea de las madres que crían solas SociedadPor Bárbara Arias Oyarzún - 4 noviembre, 2024 En mayo del año pasado en Chile entró en vigencia la Ley 21 484 sobre responsabilidad parental y pago efectivo de deudas de pensiones de alimentos, con el fin de que las personas se pongan al día y tengan la obligación de cumplir económicamente. Pero ¿aquello compensará toda la labor que realizan las madres? Tener un hijo de por sí ya es complicado, pero no contar con la presencia del padre hace que sea aún mayor, puesto que la responsabilidad y crianza recae solamente en la madre. Es por esto que la maternidad es una labor digna de admirar, ya que muchas veces dejan su vida de lado para dedicarse a formar y educar otra. Un bebé en camino Agustín es un niño de cinco años. Según su mamá se caracteriza por ser muy expresivo con sus emociones. Foto de Elizabeth Rubilar. Poseer en el vientre un ser humano que está en formación durante nueve meses es algo que solo lo viven las mujeres. El quedar embarazada puede ser algo planeado o simplemente el destino hizo lo suyo. Dentro de aquel periodo la madre experimenta distintos cambios que provocan que cada gestación sea distinta. Elizabeth Rubilar es una de esas mujeres que, si bien no tuvo grandes síntomas durante ese periodo excepto por el cansancio, recordó que «la parte emocional sí fue difícil porque en primera instancia, el papá de mi hijo iba a estar presente, sin embargo, se arrepintió y desapareció. Nunca fue partícipe de una ecografía, ni de nada hasta el día de hoy». Otro caso parecido es el de Pía Recabarren, quien dio a luz hace exactamente un año y cinco meses de Agustina. «Estuve con psicóloga durante todo ese periodo y el postparto, ya que terminé con el papá de mi hija a los tres meses de embarazo. Entonces fue un proceso complicado», expresó. Ser madre y padre a la vez El emprender sola la maternidad implica de múltiples desafíos, ya que no tienes al lado un compañero con el cual dividirse las tareas básicas como preparar la leche, cambiar los pañales o hacer dormir al bebé, entre otras. Bien sabe del tema Cristina Godoy, quien es madre soltera de cuatro hijos. «Lo más difícil es tener el equilibrio entre el tiempo, ingreso y estabilidad económica que es un factor muy importante, más cuando estás sola», relató. Cristina les enseñó desde muy pequeños a sus hijos a hablar las cosas entre los cinco. Foto de Cristina Godoy. Actualmente sus hijos son mayores de edad, pero en aquella época cuando solo eran unos niños, Cristina estaba estudiando una carrera profesional. «Si no había nadie que los pudiera cuidar, tenía que llevarme a los cuatro a la universidad. Por ende siempre iba preparada; llevaba cosas para pintar, mamaderas, pañales y todo lo necesario», recordó. En tanto para Elizabeth, lo más complejo es «cuando la crianza no es compartida. Si bien tengo mucho apoyo, la responsabilidad en todo orden de las cosas es solamente mía. Aquí no hay nadie con quien tomar la decisión», sostuvo. Es por esto que, «la carga emocional para las mujeres que son mamá y papá es fuerte porque es ella quien va a estar en todas las faenas de ese niño, desde lo más práctico hasta lo emocional. Además, estamos en un tiempo donde las madres trabajan, por lo tanto son muchas cosas con las que tienen que lidiar», señaló María Paz Villegas, psicóloga clínica. El apoyo de los seres queridos A pesar de la gran labor que deben realizar las madres solteras, esta puede ser más amena al contar con una red de personas importantes en su vida. En el caso de Pía, su familia es fundamental en esta etapa de crianza. «Tanto mis papás como mis abuelitas y tías me ayudan mucho con el cuidado de Agustina. Incluso mi mamá dejó su trabajo para estar con ella, eso tiene mucho valor para mí porque uno necesita de apoyo», destacó. Por otra parte, Cristina ha contado principalmente con la ayuda de mujeres. «Gracias a Dios he tenido a muy buena gente conmigo, por ejemplo mi mamá, mis primas, amigas y mi vecina de enfrente. Siempre estaré agradecida de todas esas personas que significan mucho para mí y les digo a mis hijos, ya que de repente no se acuerdan quien los anduvo trayendo porque eran chicos», expresó. Criar desde el amor Cada madre tiene un concepto distinto de las cosas que desea inculcar y transmitir a sus hijos. Para Elizabeth es importante que Agustín «sea empático, respetuoso, feliz, preocupado por los demás y que no discrimine a nadie. También, no importa lo que él escoja en su vida, la mamá siempre va a estar ahí, ayudando a cumplir todos sus sueños», reflexionó. Mientras que Cristina busca como madre transmitir «los valores y que hay cosas mucho más importantes, como la honestidad, la lealtad y el amor. Al igual que la magia, ya que siempre les he enseñado a mis hijos que la vida tiene de eso», compartió. Actualmente tres de sus hijos están en la universidad y uno terminando la Educación Media. Foto de Cristina Godoy. La satisfacción de ser madre Pía aparte de ser madre, se desempeña como enfermera en el Hospital Puerto Montt. Foto de Pía Recabarren. A pesar de que el camino de la maternidad puede ser complejo y hasta algunas veces abrumador, al final del día siempre llega una recompensa para esas madres que luchan por el bienestar de sus hijos. Por ejemplo, para Elizabeth lo más satisfactorio es «que me diga ‘mamá te amo’, que corra a mis brazos después de un rato sin habernos visto y que esté tan preocupado por mí. Entonces, esas son las cosas que digo ‘ay tan mal no lo estoy haciendo así que démosle’», confesó. En cambio para Pía lo más confortable de ser mamá soltera es «que sí puedo sola, aunque no es fácil te haces mucho más resiliente y fuerte mentalmente. Además tienes ganas de salir adelante porque hay alguien que necesita de ti», concluyó. Ser madre y criar sola es una gran tarea que no todas las personas comprenden. También te puede interesar: Diabetes gestacional: una enfermedad común en las embarazadas