Un compañero de vida y la sanación de problemas de salud mental SaludPor Amanda Villaseca Felip - 8 noviembre, 2024 La existencia de las mascotas de apoyo emocional es algo relativamente nuevo, que se ha implementado desde ramas de la psicología y veterinaria. Los beneficios que presenta para los problemas de salud mental son variados y van acompañados de la salud física en la mayoría de los casos. Para muchos, los animales de apoyo emocional son su principal compañero de vida. Las mascotas en general desde que tenemos memoria han sido un apoyo para sus dueños, brindando alegría y ternura con la inocencia que les caracteriza. En términos generales, los animales ayudan a regular y disminuir síntomas de ansiedad y estrés. Sin embargo, existen trastornos como el espectro autista, ansioso o depresivo, en los que existe un entrenamiento especial para los animales encargados de cumplir el rol de cuidador. El rol del entrenador es fundamental para que la mascota cumpla con las características específicas que requiere cada persona según sus necesidades. Los beneficios de tener una mascota de por sí, van desde la salud física, por ejemplo al pasear a un perro, ya que involucra salir a caminar constantemente más de una vez al día. Asimismo, también colabora con el aspecto social, pues además de mejorar el estado de ánimo, por la liberación de endorfinas y oxitocina, los animales tienden a ser un punto de conexión con otras personas, por lo sociables que tienden a ser. Además, puede llegar a reducir significativamente el sentimiento de soledad y la tendencia al aislamiento físico y emocional. Por otro lado, están los animales que no son domésticos, pero que también pueden ser parte importante del tratamiento de ciertos problemas de salud mental, e incluso de procesos como la rehabilitación por abuso de sustancias, problemas de la conducta alimentaria y procesos de duelo. En este proceso están incluidos animales como los caballos, los delfines y otros animales acuáticos, los cuales son menos comunes. Este tipo de intervenciones son asistidas por profesionales que guían el proceso y se encargan de guiar el tratamiento y velar por el bienestar tanto del animal, como de la persona. Los gatos, aunque sea menos común, también pueden ser mascotas de apoyo emocional. Imagen de Purina.com. Viviana Recasens es una persona que tiene un animal de apoyo, el cual es un gato. “Tomi” es su compañero de vida desde que Viviana sufrió la pérdida de su esposo. La idea de tener una mascota de apoyo emocional fue de su psicóloga, tras asistir un tiempo a sesiones semanales. “La llegada de Tomi a mi vida fue increíble, porque aunque no lo parezca, estoy segura de que él entiende lo que estoy pasando, yo le hablo harto sobre mi marido y lo mucho que lo extraño. Siento que él entiende porque me maúlla de vuelta, me siento acompañada con él en la casa, ya no estoy más sola desde que él llegó al departamento”. Desde la psicología se cree que los animales pueden generar estados de calma y relajación profundos, sumado a los beneficios en el ámbito físico y social de los dueños. Según Ana Solís, psicóloga que ha estudiado en profundidad el rol de los animales en la asistencia a problemas de salud mental, existen varias patologías que pueden ser tratadas de esta manera. “Trastornos como el estrés postraumático son bastante complejos de tratar, especialmente por la gravedad de los síntomas. Sin embargo, los animales de asistencia emocional han demostrado ser un acompañamiento primordial para la seguridad de los pacientes para enfrentar sus traumas, pues ya no lo hacen solos, sino que con un compañero que está a su lado paso a paso en la recuperación”. Aspectos formales y facilidades de transporte En cuanto a los requisitos para que un animal pueda ser considerado una mascota de apoyo emocional, no son tan rigurosos a diferencia de las mascotas de servicio para necesidades físicas, por ejemplo, para personas no videntes. En este caso, hay muchas menos restricciones, pues la relación entre el paciente y el animal es más cercana y la rutina del animal no es tan estricta como en otros casos. Algunos de ellos, son contar con certificado de vacunas, desparasitaciones, además de estar acostumbrados a transportarse constantemente. Por otro lado, algo que suele preocupar a ciertos especialistas en etología, que son quienes se encargan de estudiar el comportamiento de los animales, es el bienestar del animal a la hora de asistir a las personas que lo requieren. Al respecto de esto, Macarena Fernández, estudiante de último año de veterinaria de la Universidad de Concepción, señala que es un debate constante en la carrera. “Un animal de apoyo emocional requiere los mismos cuidados que cualquier mascota, la relación se tiene con un animal de apoyo emocional se trata de dar y recibir. En la mayoría de los casos las personas cuidan muy bien a sus mascotas y no afecta el rol que tiene en su calidad de vida”. Hoy en día los animales de apoyo emocional pueden viajar internacionalmente, con ciertas condiciones. Imagen de SAFE Mascotas. En la actualidad es mucho más común que los animales de apoyo emocional tengan permitido el ingreso a locales comerciales, lugares de estudio, e incluso medios de transporte, como los buses o los aviones. Por ejemplo, en Chile, para la aerolínea Latam, las especies que están permitidas a bordo para la Asistencia Emocional, según la ruta, son: Perros, para vuelos internacionales desde y hacia Argentina, México o Colombia, y gatos, desde, hacia y dentro de Colombia, y desde y hacia Argentina. Además, deben contar con un kennel o bolso de transporte durante todo el vuelo, bajo el asiento delantero.