En menos de dos meses el centro de Concepción fue testigo de hechos de violencia física y verbal por parte de autodenominados “predicadores” hacia transeúntes.  

El municipio de Concepción cuenta con una normativa que regula los usos de altoparlantes en lugares públicos. Sin embargo, las fiscalizaciones son pocas y no cumplen con las expectativas de las personas. 

Durante los primeros días de marzo, un supuesto pastor evangélico, Jean Paul Navarro, a través de altoparlante, afirmaba que las mujeres y niñas “provocan” a los hombres y “buscan que las violen”. El hecho tuvo lugar en la Plaza de Independencia de Concepción, generando repudio por parte de la población, e incluso motivó acciones legales por parte de la Delegación Presidencial del Biobío informó La Tercera.  

El discurso perpetrado por Navarro deja ver la cultura machista que aún abunda en nuestra sociedad. Parece inaceptable que en pleno 2025 aún sea posible que sin mayores barreras una persona pueda perpetrar ese tipo de discursos en lugares públicos. 

Otro episodio de violencia se vivió el pasado fin de semana en el centro penquista. Una mujer denunció haber sido víctima de agresiones físicas y verbales por una veintena de predicadores, tras solicitarles que bajaran el volumen del altoparlante. A solo pocas semanas de los denigrantes dichos, Navarro encendió las alarmas en la municipalidad y en la ciudadanía. 

Si bien diariamente se ve a grupos de personas predicando en las calles más concurridas de la ciudad penquista, no es común ver que se formen conflictos por ello. “Al tener un alcalde que es pastor, evidentemente hoy día se sienten más empoderados los pastores (…) Este es un Estado laico, y yo creo que llegó el tiempo de poner límites” declaró la concejala de Concepción, Claudia Arriagada a la radio Biobío. 

Estas graves vulneraciones dieron pie para que la concejala Claudia Arriagada impulsara una propuesta para prohibir el uso de altoparlantes para predicadores en espacios públicos. Una medida que, ante los hechos ocurridos en el último tiempo, parece indispensable para la seguridad ciudadana. 

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