De la computadora al estadio, los eSports avanzan a pasos agigantados y su futuro no tiene techo. Con increíbles torneos de acceso liberado gracias a plataformas como Twitch y Youtube.

Hace ya varios años, se especulaba que las competencias de videojuegos podrían llegar a alcanzar los números de los deportes tradicionales. Hoy por hoy, la incógnita ha evolucionado hacia cuanto tardarán en superarlos. Antiguamente, jugar un videojuego significaba un pasatiempo, una forma de entretención. Pero, las cosas han cambiado rotundamente, ya que ser un jugador profesional es el sueño de muchos.

Sin embargo, para conseguir este objetivo es importante tener en cuenta que no solo se necesita talento, sino que también, una gran cantidad de horas, comprender el videojuego mecánicamente y adquirir fortaleza mental para combatir el estrés que produce.

Son muchos los factores que determinan la calidad de un jugador. Y es gracias a esto que los jugadores casuales quedan cautivados por el nivel que muestran los profesionales en las competencias. Lo que influye directamente en quienes trabajan para jugar al más alto nivel y da origen a la ola de aficionados que admiran sus hazañas.

Cristian Valencia, informático de 27 años, es un fiel fanático de KRÜ, equipo profesional de VALORANT. Él nos comenta que es capaz de madrugar con tal de ver sus partidos: “El otro día les tocó contra Cloud9 y jugaron muy tarde, pero me compré unas energéticas y pude esperar para verlos jugar”. También, expresó que junto a su grupo de amigos, esperan con ansias el mundial de VALORANT que se celebra cada año: “Llevamos ya varios años haciendo juntas para ver el VALORANT Champions, que es como el torneo más importante. Siempre compramos cosas para comer y nos quedamos toda la noche viendo partidos”.

Audiencia generacional

Al igual que Cristian, muchos jóvenes nacieron en sincronía con el florecimiento de los primeros torneos de videojuegos. Además, en la sociedad actual, las nuevas tecnologías prácticamente son un acompañamiento predilecto de los más pequeños. Es por ello que podríamos considerar normal que les llame más la atención jugar videojuegos que practicar un deporte.   

Nuestros abuelos y padres pasaron su infancia viendo ídolos de futbol o tenis, pero las nuevas generaciones crecieron viendo torneos de Counter-Strike. Con jugadas que hoy están inmortalizadas, como el legendario “Hombre ardiendo” de Olofmeister, o el “Jumping AWP” de coldzera.

Benjamín Arriagada, jugador casual de Counter-Strike, comentó lo siguiente: “Para mí, que no me gusta ver futbol ni nada de eso, ver la Major de cualquier región es genial, ya que la gente se vuelve loca y la energía es brutal”. Y lo que afirma Benjamín no es casualidad, puesto que estos torneos han alcanzado un récord de 2 748 850 espectadores simultáneos.

La comodidad de las nuevas plataformas

Además, hay que admitir que el contenido digital es mucho más interactivo y te permite comunicarte con los comentaristas. Por otra parte, posee increíbles puntos de vista para destacar jugadas individuales, como si cada jugador tuviera el protagonismo en su debido momento.

Si tenemos en cuenta que acceder a una transmisión de Twitch o Youtube es gratuito, nos daremos cuenta de que solo son ventajas en comparación con los deportes tradicionales. Esto se debe a que las subscripciones para ver deporte en vivo han alcanzado precios altísimos. Por ejemplo, para ver la NBA debes pagar el plan prémium de Disney+. Entonces, si además te gusta ver otros deportes, tendrás que pagar numerosas plataformas, lo cual significa un gran gasto.

Alan Sepúlveda, estudiante de Ingeniería Industrial de la Universidad del Biobío, nos comenta que en su tiempo libre se dedica al Fortnite de forma competitiva: “Cuanto era pequeño jugaba Fortnite todo el día, porque soñaba con ser profesional y estar en esos tremendos estadios”.

Son jóvenes como Alan, que ven los videojuegos de otra manera, los que impulsaron el competitivo al nivel de los deportes tradicionales. De este modo, se origina una pasión colectiva que termina por darle a los eSports la importancia que tienen.

Casinos y auspiciadores en el mundo de los eSports

Por supuesto, todo este crecimiento requiere de una gran capital, ya sea para pagarle a los jugadores como para desarrollar más la industria. Ahí es donde entran las grandes empresas, que invierten millones en las franquicias de videojuegos. Lo anterior, se resume en un funcionamiento similar a los equipos de futbol u otro deporte colectivo.

También están las casas de apuestas que, además de patrocinar a algunos equipos para conseguir clientes, permiten que las personas puedan apostar su dinero en vivo. Con tarifas que fluctúan en el rendimiento actual y la historia de un equipo, tal como funciona en los deportes tradicionales.

La cultura, la integración de las redes sociales y las nuevas tecnologías han creado un nuevo campo de entretenimiento con gran proyección. Si bien, es apresurado decir que los eSports superarán a los deportes tradicionales, es probable que, al menos, los alcancen.