Soñador, enfocado y esforzado. La historia de un artista emergente con un sueño al servicio de los demás.

Benjamín Barra es un estudiante universitario muy talentoso en el ámbito musical. Actualmente, forma parte de una banda llamada “Vennus” con la que asiste a conciertos y crea canciones. A pesar de que se le dificulta definirse a sí mismo, se considera alguien bastante serio, pero con momentos entrañables. Si lo empujamos a elaborar una frase que lo refleje con fidelidad, afirma que es “una persona realista y que acepta el curso de la vida con seguridad, sin tratar de buscar cosas donde no las hay”. 

Donde nace su camino

La niñez de Benjamín es bastante allegada a su familia y agradece todo el apoyo que le han brindado a lo largo de su vida, siendo su pilar fundamental: “Desde que tengo memoria me ha llamado la atención el entender el funcionamiento de las cosas, mi vida se vio influenciada principalmente por mi familia, que es el sostén principal de quien soy. Ellos nunca me impidieron hacer todas estas cosas que me llamaban la atención, por el contrario, me motivaban a ir más allá y me apoyaron en todo lo que estaba a su alcance. Es por todo eso que considero y agradezco a mi familia, por hacerme quien soy actualmente”.

A lo largo de su vida, Benjamín fue cayendo en distintos hobbies que trató de llevar a cabo con su mayor esfuerzo. Practicando básquetbol durante su etapa escolar y finalizando la misma etapa tomando un camino más artístico como la música. Actualmente, es miembro de dos bandas. Sin embargo, a la hora de completar sus estudios escolares se encontró con un momento de incertidumbre. “Tuve mi crisis vocacional porque me gustaban demasiadas cosas y consideraba que todas me iban a llenar, pero todas estas cosas que me gustaban tenían una raíz común: la ciencia”.

Es gracias a su interés por las incógnitas del universo y la ciencia que Benjamín optó por estudiar la carrera de Bioquímica, la que cursa actualmente. Además, considera que el apoyo de su familia y amigos le ha permitido ser una persona agradecida, que pueda ayudar a los demás: “Considero que el apoyo de mi familia, amigos y compañeros ha hecho de mi vida una muy grata experiencia. Es por esa razón en particular que siempre intento ayudar a los demás y poder cumplir con tareas que aporten al bien popular”.

Gran parte de su brújula moral a la hora de ayudar a otros se debe a su familia y amigos. Comenta que ha tenido unos valores muy presentes y que agradece profundamente las relaciones que ha formado hasta ahora. Su experiencia de vida ha sido mucho más diversa y rica gracias a su corazón abierto, afirmando que “le debo todo a mis cercanos” con respecto a su crianza. 

Su sentido de la identidad se mantiene coherente cuando nadie lo está viendo, conocer a Benjamín y hablar con él es su versión más sincera. En sus momentos de introspección especifica que “acostumbro a pensar sobre cosas que debo hacer o que me faltan por hacer. Todo eso tratando de no volverme loco”.

Compaginar la dualidad

Con pasos firmes avanza hacia un punto donde sus hobbies y estudios puedan convivir, en alguien donde su orgullo y logros sean aún mayores. Pero para este punto de su historia de vida, Benjamín declara que: “Siempre me gustó estudiar, en este momento lo estoy priorizando y poniendo mis hobbies en segundo plano. Creo que estoy haciendo un buen trabajo y estoy orgulloso de ello”.

Fuera de sus pasiones nacidas desde sus hobbies, se presenta como un gran amante, quizás un real romántico, sentir la pasión por amar con intensidad y profundidad. Alejarse de la persona que ama por seguir su pasión, es faltarle el respeto a las otras cosas que le hacen latir el corazón, tal como él lo dice: “Amar también es una gran pasión, si es que realmente estás amando, encuentras en esa persona una fuente de compañerismo y apoyo incondicional, cosa que considero indispensable para mi vida”.

Sus luces y sombras

Un artista que sigue el camino de sus sueños en compañía de quienes ama. Sin embargo, su mayor meta no tiene que ver con la música, ni el dinero, ni tampoco la fama. Se trata de un camino muy alejado de lo sencillo. Con una gran ambición en los ojos, le gustaría ser galardonado con un premio Nobel de ciencias: “Mi mayor sueño la verdad es uno en el que he estado pensando últimamente y siempre lo he dicho como una broma, nunca lo he pensado como algo que pudiese ocurrir, pero realmente me gustaría ganar un Nobel de ciencias. Es curioso y siempre lo digo como un chiste, es realmente loco y sé que estoy muy lejos de ello, pero sería algo fantástico”.

Benjamín confía en sus capacidades y afirma que “puedo ayudar a la gente haciendo lo que amo, y que eso tenga reconocimiento, me parece increible. Un Nobel es demasiado, pero el reconocimiento en mi universidad, en mi ciudad, o hasta en mi país lo veo tangible y ojalá poder lograrlo”.

Además, refleja cómo será su vida en unos años si sigue haciendo las cosas de manera correcta, dejando en claro que tiene muchas cosas por hacer, como brindarle tiempo tanto a su familia como a proyectos personales: “De acá a 10 años me veo como alguien que esté disfrutando el momento, intentando alcanzar mis sueños, trabajando en lo que estudié y me apasiona. También dedicando tiempo a mi familia y a todas las cosas que no logré hacer en su debido momento. Creo que hay demasiadas cosas que quiero conseguir, debería hacer una lista de ellas y tratar de lograrlas en un plazo determinado”. 

Nuestro artista penquista no está exento de sus propios demonios. Hace seis años fue que la vida le dio un golpe muy duro, tanto a él como a su familia. El fallecimiento de su tía Cecilia lo marcó como ningún otro suceso. Aunque él mismo lo cataloga como el peor instante de su vida, también lo asimiló como una prueba de su propia fortaleza, ya que “fue un momento de tanta angustia en la cual me vi forzado a colaborar con los paramédicos. Creo que esa experiencia tan traumática me hizo volverme un poco más fuerte. Fue ahí donde comprendí que siempre podemos ayudar a alguien cuando lo necesite, tener empatía por los demás es fundamental en la vida”. 

¿Qué le espera al futuro de Benjamín?

El futuro mira a Benjamín con buenos ojos, recientemente se ha lanzado el videoclip de la canción “Alicia” por parte de su banda. Benjamín está ilusionado con este estreno, pero intenta mantener ese realismo que lo caracteriza. Él lo entiende como un pequeño paso en su camino como artista, la catarsis de su esfuerzo en la banda, él agradece haberse convertido en un “conejito playboy con guitarra”.

La historia de Benjamín nos hace sentir que los sueños no tienen edad y que el deseo de convivir con sus seres queridos y ayudar al prójimo son el motor para su futuro. Hoy en día la individualidad es muy común y los sueños tienen siempre relación con objetos materiales. Por lo que encontrar a alguien que su aspiración sea una forma de conocimiento para la ayuda colectiva, es algo digno de admirar. Escuchar a una persona como Benjamín es muy motivante, que tenga sus sueños claros y que conozca el camino que recorre. No obstante, todos avanzan a su debido tiempo y la idea es nunca darse por vencido.