Son las 03:00 de la madrugada y no logro conciliar el sueño del hambre que tengo. Me levanto y voy directamente al refrigerador de mi casa en búsqueda de algún alimento que sacie mi apetito. Por lo general, prefiero pan o algo de comida que haya quedado del día. Esto me pasa de 2 a 4 veces a la semana. 

Muchas personas podrían creer que es totalmente normal, que sólo tengo hambre o que es de ansiosa, pero desconocen que padezco el síndrome del comedor nocturno.

¿Qué es el síndrome del comedor nocturno?

Esta enfermedad es de carácter multifactorial, ya que posee un ámbito nutricional, psicológico y también se considera un trastorno del sueño, que consiste en hiperfagia nocturna. Esto quiere decir, que las personas durante la noche sienten de manera consciente una ansiedad de consumir alimentos, principalmente carbohidratos y alimentos altos en azúcar como: galletas, dulces, chocolates, fideos, pan, entre otros.

Silvana Cisternas, nutricionista de Inacap, menciona que “este síndrome se presenta mucho más en mujeres adultas entre 35 a 40 años, que tienen tendencia a tener sobrepeso y obesidad. Además, son personas que son inapetentes durante la mañana pero en la noche aparece todo el apetito”.

A su vez, indica que quienes sufren de este síndrome, consumen hasta el 35% de sus necesidad energéticas diarias durante la noche, lo que va de la mano con otros trastornos como problemas con el sueño, aumento del colesterol total y los triglicéridos, que pueden desencadenar problemas al corazón, diabetes, entre otras enfermedades.

 ¿Cómo diagnosticarlo?

La nutrióloga Verónica Álvarez, menciona que la familia debe estar atenta a los síntomas ,o que el paciente tenga la capacidad  de identificarlos. Estos pueden ser:

• Cuando una persona sufre de sobrepeso y constantemente está intentando de bajarlo.

• Es inapetente durante las mañanas, lo que va acompañado de saltarse el desayuno 4 veces a la semana o despertar sin hambre.

• Siente una necesidad de comer antes de ir a dormir o durante la noche.

• Cuando la persona siente la necesidad de comer algo para volver a dormir.

• Estado de ánimo depresivo o que empeora en la tarde.

• Este patrón de alimentación se ha mantenido por al menos 3 meses.

Prevención

Para combatir este síndrome lo esencial es diagnosticar el motivo, ya que muchas veces se oculta bajo una depresión no diagnosticada o tratada.

El psicólogo Juan Pablo Ogueda, indica que “consumir melatonina antes de ir a acostarse, podría ser de ayuda, ya que a pesar de que el ser humano la produce de forma natural es una hormona que ayuda a conciliar el sueño, pero hay personas que no la producen en grandes cantidades”. A su vez, menciona que este trastorno es sumamente diferente en cada persona, por ende la terapia es clave para los pacientes.

Además, es esencial mantener una dieta saludable con frutas y verduras, realizando deporte, y que quienes visualicen algunos síntomas, puedan asesorarse con un equipo multidisciplinario.

En la siguiente infografía están los conceptos claves que se debe saber para llevar una dieta equilibrada. No obstante,se debe recordar que todas las personas son diferentes por ende se debe acudir a un especialista para que vea su caso personalmente.