La gira del presidente Gabriel Boric causó revuelo en el sector político de oposición debido a su simultaneidad con el sistema frontal.

“Ni Gabriel Boric es el Estado, ni el Estado es Gabriel Boric”, dijo el parlamentario de Renovación Nacional (RN), Diego Schalper, a Radio Pauta. La política es un mundo complejo, lo suficiente para que, al menos una vez al año, la oposición respalde al Gobierno de turno.

Críticas causó la ausencia del mandatario durante las inundaciones por el sistema frontal. Boric se encontraba en Europa realizando una gira presidencial. Este hecho, a mi juicio, hizo temblar los pilares del sector político más conservador.

Si la Biblioteca del Congreso Nacional define al Estado como una persona jurídica de derecho internacional, ¿por qué seguimos pensando que la única manera de gobernar es a partir de elementos tangibles? Creo que estamos retrocediendo.

En cuanto a citar expresidentes fallecidos, la UDI es experta. Tal como afirmó el periodista Juan Vallejos al programa “Quién Paga la Fiesta”, los argumentos parecen sostenerse sólo referenciando a Sebastián Piñera.

Considero que aquel Gobierno nos dio una perspectiva limitante, dando a entender que, si un presidente no está en todas partes al mismo tiempo, no sirve. Pero tal y como dijo Schalper, si Gabriel Boric no es el Estado, entonces… ¿qué queda?

Si algo nos ha enseñado la historia, es que esperar a quien esté al mando hace perder las batallas. ¿Aguardarían los criollos a la liberación del rey de España para actuar? Sabemos que no. De la misma forma, no se puede contar siempre con la presencia del jefe de Estado para cada crisis que ocurra en Chile.

El Estado son las personas y creo fielmente que nadie es indispensable. Y reafirmando los dichos de Schalper, asumir que un solo ser humano es capaz de resolver todos los problemas es poco democrático. El show debe continuar. Y si no lo entienden, tocará pedirle al alcalde Carter que se los explique en alemán y al propio mandatario que lo traduzca al francés.