El primer procedimiento fotográfico fue inventado por Niépece hacia 1824. Según la Casa Nicéphore Niépice, la fotografía se obtuvo con betún de Judea, extendida sobre una placa de plata, luego de un tiempo de exposición a la luz que duraba varios días.

En 1829, Niépice asocia a Louis Jacques Mandé Daguerre en sus investigaciones dando vuelco e inicio a lo que conocemos como las primeras fotografías de la historia.   

Daguerre inventó el daguerrotipo en 1839, fue la primera técnica fotográfica para captar imágenes mediante una cámara. Permitió capturar imágenes permanentes en placas de cobre recubiertas de plata. Invento que revolucionó la percepción de la realidad y democratizó el acceso a la fotografía que, con el paso del tiempo, comenzó a evolucionar significativamente.

Relevancia social

La fotografía nace debido a la necesidad de capturar todo lo que nos rodea. Este proceso vino a facilitar la obtención de imágenes, pues forma parte de las evidencias visuales que, a su vez, ayudan a reconstruir el pasado y la memoria histórica.  

No solo transformó la forma de documentación visual, sino que también desempeñó un papel de suma importancia en distintos procesos sociales alrededor del mundo. Esto permitió una mayor facilidad al momento de crear registros con un valor histórico y en la denuncia de injusticias masivas de eventos significativos de la historia. 

En Chile, la fotografía llegó en la segunda mitad del siglo XIX. Con estudios fotográficos establecidos en Valparaíso y Santiago, siendo la fotografía en papel albuminado y estereoscópica las más populares durante las primeras décadas. Sin embargo, a lo largo del siglo XX, la fotografía en Chile reflejó los distintos procesos de cambios en el país, impactando diversos aspectos sociales, culturales y políticos.  

Ha sido una herramienta vital para documentar la historia. Ha capturado momentos cruciales como la construcción de infraestructura en Valparaíso y Santiago, y retratando la vida cotidiana de las diversas clases sociales.  

La fotografía se consolidó como una herramienta esencial y de suma importancia para el registro de la memoria y la justicia social, como un medio de denuncia y testimonio. Los registros obtenidos de la documentación de violaciones a los derechos humanos durante la dictadura militar crearon testigos visuales.

Durante el periodo de dictadura militar en el país, los fotógrafos realizaron la peligrosa, y a la vez importante, labor de usar sus cámaras de forma clandestina. Se documentó la brutalidad del régimen y se entregó evidencia visual con la cual se pudieron sostener denuncias internacionales.  

Años más tarde, en la nueva era democrática, la fotografía continúa siendo un instrumento de cambio social, apoyando movimientos como protestas estudiantiles y las demandas de justicia y equidad.  

Fotografía y cultura

En el ámbito cultural, la fotografía ha sido una forma de expresión artística que permite a los artistas explorar y representar una identidad. Abre las puertas a la reflexión sobre temas contemporáneos a través de distintas exposiciones y publicaciones.  

Gracias a la revolución digital y el avance tecnológico se ha democratizado la fotografía. Lo cual permite que cualquier persona con acceso a un smartphone pueda capturar y compartir imágenes instantáneas. Esto facilita el registrar las propias vivencias, amplificando diversas realidades y fomentando la participación ciudadana en la construcción de memorias colectivas.  

Si te interesó puedes visitar: Memoria fotográfica de un año difícil en Fotoprensa 42