Las terapias alternativas en el tratamiento de la salud mental Portada SaludPor Constanza Gutiérrez C. y Constanza Parra - 22 noviembre, 2024 Algunas más aceptadas que otras, la psicología cuenta con muchas terapias alternativas que utilizar frente a las necesidades de los pacientes. Existen diversos tipos de terapias alternativas cuando se habla del bienestar psicológico, como lo son el yoga, la hipnosis, la meditación, la aromaterapia o algunas más invasivas como la acupuntura. Estas se usan para potenciar a los pacientes y ayudarles a su desarrollo, como lo es la arteterapia, que según el Departamento de Arteterapia Metáfora, sirve para ayudar al paciente con la comunicación y expresión. Según se explica en la página web de Neuroclass, el término inicia cuando Adrian Hill, decide compartir con otros esta técnica, que había funcionado con él mientras se recuperaba de la tuberculosis en un hospital, dando cuenta del potencial que había en el arte para ayudarlo en ese proceso. Otra de las terapias que se explican en este texto es la zooterapia, donde se llevan a cabo sesiones con animales presentes. La Clínica de Medellín cuenta que esta se remonta a 1953, cuando el psicólogo Boris Levinson notó que la presencia de su perro animaba a interactuar a un niño con trastorno del espectro autista. Un artículo de National Geographic España indica que en el Hospital Clínic de Barcelona se estudiaron las mejoras en pacientes menores de trece años, luego de incorporar la asistencia de perros en su proceso terapéutico. El artículo dice que los resultados de este estudio arrojaron que “el número de crisis emocionales y episodios de agitación o agresividad se redujeron a un tercio en los días que los perros estaban presentes en la sesión, respecto a los días en los que no estaban”. Además, menciona que los niños en general se encuentran más tranquilos y por ende es más sencillo trabajar con ellos. ¿Cómo ayudan las terapias alternativas? Según Matías Campos, psicólogo del Centro Integral Acuarela, el uso de técnicas alternativas en la terapia tiene como finalidad que el paciente logre “elaborar las situaciones que le han ocurrido, hacer conexiones donde quizás no lo hacían antes, que una emoción con pensamiento”. Además, agregó que las herramientas se deciden de acuerdo a lo que necesite el individuo. “Se va viendo caso a caso, si es que se beneficiaría, por ejemplo, de algún tipo de uso del arte”, indicó Matías, haciendo énfasis en que hay que ir con cuidado, observando cómo reacciona la persona ante las terapias alternativas, ya que no es un trabajo estándar que se repite, sino que es muy personalizado. La arteterapia se usa para el bienestar emocional de adultos mayores.Foto de JIUN-JE LIN La arteterapia Como indica un artículo de Psicología y Mente, la arteterapia es “una forma de terapia expresiva que usa el proceso creativo del arte para mejorar el bienestar físico y psicológico del paciente”. Según el mismo artículo, esto potencia el autoconocimiento del paciente ante su pasado, su personalidad y sus problemas psicológicos. Además, tiene la característica de ser poco invasiva, la cual ayuda a resolver conflictos mentales, dando una vía de expresión por medio del arte, y como resultado secundario, permite al paciente potenciar o disfrutar de habilidades artísticas, las cuales pueden ser la pintura, la alfarería, la música, la danza y la escritura. Las terapias asistidas con perros La psicóloga Pamela Fuller, especialista en intervención asistida con animales en PsicoEduCan, explicó que durante la terapia psicológica ella incorpora a perros, los cuales son escogidos de forma meticulosa según sus niveles de energía. Luego de eso, se deciden las actividades que se realizarán con el canino, las cuales deben estar alineadas con los objetivos de la sesión y tomando en cuenta siempre al paciente. Su enfoque es la psicología infantojuvenil, por ende, ella genera una estructura para cuidar y beneficiar a los niños. Román Cuevas, quien es educador canino profesional especializado en entrenamiento de perros y técnico en intervención asistida con ellos, trabaja junto a Pamela Fuller. Él se encarga de realizar pruebas de temperamento y comportamiento, empezando a entrenar a los animales desde los dos meses de edad, lo cual se realiza de forma minuciosa, siendo esto necesario para involucrarlos en las terapias con niños. Pamela indicó que “por ejemplo, niños con déficit emocional, con hiperactividad, pueden llegar y saltar bruscamente al lado de un perro, gritar, hacerle cariño muchas veces o apretarlo más de la cuenta. Uno bien entrenado te asegura que es un animal equilibrado y que no va a reaccionar frente a esas cosas”. Es por esa razón que ellos están completamente preparados y entrenados, además, cada cual tiene una personalidad distinta, habiendo uno ideal para cada tipo de persona. En el 1200 a.c los griegos tenían perros en templos de sanación.Foto de JIUN-JE LIN El deporte como terapia Hay procesos de sanación que muchas veces no son potenciados por una terapia psicológica, sino que simplemente ocurren debido a alguna actividad que los desencadena. Por ejemplo, según el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Chile (INTA), el ejercicio físico “produce sentimientos de calma y bienestar, asociados a la liberación de hormonas y neurotransmisores. Entre las más conocidas están las endorfinas, unas proteínas pequeñas que tienen una estructura química muy parecida a la morfina y que son producidas por nuestro organismo”, lo cual significa que una alta cantidad de estas tiene un efecto analgésico y de bienestar, sin tener que experimentar las contraindicaciones que poseen los fármacos, indica el INTA. Para Felipe Chodiman, un joven de 20 años que juega fútbol con amigos, el deporte ha sido una herramienta para sobrepasar el nerviosismo y la ansiedad de entrar a la universidad. Indicó que “servía muchas veces como simplemente ir a despejarse, a jugar y liberar ese estrés, esa adrenalina ayuda muchísimo”. Por otra parte, Trinidad Elgueda se ejercita sola en su hogar, con rutinas que la mantienen activa, y reconoce que eso le ayuda a disminuir los niveles de ansiedad frente a las actividades que debe realizar durante el día. “Me ha hecho estar más calmada, más activa y más relajada”, comentó Trinidad, quien enfrenta su último semestre académico. Un apoyo diario Es necesario tomar una terapia psicológica para tratar las afecciones mentales.Foto de Alex Green Es conocimiento popular que el deporte es clave al momento de trabajar con la salud mental desde el hogar, y lo mismo sucede con el estar en contacto con la naturaleza, algo que recientemente ha tomado mayor importancia desde la gran aprobación que ha recibido por parte de la comunidad científica. Esto según un artículo de National Geographic España, el cual dice que “varios estudios científicos han demostrado que las experiencias de la naturaleza pueden beneficiar el bienestar psicológico y la función cognitiva de las personas”. Tanta es la relevancia que, como indica un artículo de T13, Japón, Canadá, Nueva Zelanda y recientemente Chile, implementan esta medida en recetas médicas. Por influencia japonesa, incluso se acuñó el término “baños de bosque”, los cuales, según Yoshifumi Miyazaki, director del Centro de Investigación en Salud y Medio Ambiente de la Universidad de Chiba, “reducen la presión arterial y el nivel de cortisol en la sangre”. De forma independiente a la terapia, el arte y los animales son un gran apoyo para el tratamiento de trastornos en la salud mental, pero cuando se está tratando un diagnóstico es necesario contar siempre con la presencia de un profesional, ya que es un trabajo que se encuentra diseñado y personalizado para las necesidades del individuo, lo que permite la obtención de las mejoras esperadas.