Los universitarios tienen un ritmo de vida mayormente acelerado, atareado y con un presupuesto ajustado. Por ello, van en la búsqueda de comidas rápidas y accesibles a su bolsillo, descuidando así su alimentación y la importancia de comidas balanceadas, sanas, así como ricas en proteínas.

La alimentación en Chile cuenta desde el 2006 con la “Guía para Universidades Saludables y otras Instituciones de Educación Superior” donde se presentan recomendaciones para promover programas que fomenten el estilo de vida saludable. El Ministerio de Salud ha puesto foco en el ámbito escolar, desatendiendo la aplicación del programa en universidades o centros de formación.

Durante los últimos años, el descuido alimentario se da en la mayoría de los ciudadanos chilenos, según el estudio “Nutrición de los chilenos 2023”, realizado por la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad de los Andes, «el 86 % de la población tiene una mala o muy mala alimentación, es decir, el 37 % de ellos no sigue ninguna de las recomendaciones entregadas por el Ministerio de Salud”. A raíz de esto, los estudiantes de educación superior no quedan exentos, por ello las preguntas realizadas fueron a universitarios, en este caso de la Universidad de Concepción.

Obstáculos de tiempo y horarios

Los jóvenes en la universidad al tener diferentes responsabilidades con una rutina diaria se ven inmersos en horarios acotados de tiempo para realizar sus quehaceres, tales como estudiar, hacer trabajos académicos, cuidado personal, limpieza y principalmente la preparación de comidas o alimentación.

Macarena Herrera, estudiante de Nutrición y Dietética en la UdeC, comentó que “pienso que nos alimentamos muy mal porque priorizamos estudiar y nos saltamos comidas, por ejemplo, para muchos el desayuno no es relevante, ya que preferimos llegar temprano a clases”.

La búsqueda de una nutrición adecuada en los estudiantes es crucial para un buen desempeño en la formación de aprendizaje. Por ello, deben consumir comidas que les permitan expandir sus capacidades intelectuales.

La accesibilidad económica

Otra problemática dentro de los hábitos alimenticios es la accesibilidad a una dieta balanceada, dado que los universitarios poseen un presupuesto ajustado que deben equilibrar con los pasajes, materiales, comida y gastos extra. La joven Graciela Nova estudiante de Nutrición y Dietética de la UdeC, explicó que “es necesario priorizar el cocinarse en casa porque es económico, así no gastas de más. Un kilo de arroz te alcanza para muchos más almuerzos que comprar una vez en los locales de comida”.

Con respecto al acceso a los alimentos el ministro de Agricultura del Biobío, Esteban Valenzuela, a través de la página del Ministerio de Agricultura, se refirió a la feria del sector Las Higueras de Talcahuano, “las ferias libres son 60 % más económicas que otros canales de distribución de frutas y verduras”, haciendo un llamado a comprar alimentos en estos sectores al ser más asequible para el bolsillo del chileno.

Por otro lado, una gran ayuda para los universitarios beneficiarios es la beca de Alimentación para la Educación Superior (BAES), ahorrando un gasto mayor a los estudiantes. Sin embargo, la Junaeb realizó el cambio de poder adquirir productos mayores a tres sellos, permitiendo así a los estudiantes comprar productos altos en azúcar, sodio, grasas, entre otras.

Opciones saludables dentro de la comida rápida

La comida rápida se ha convertido en un aliado y enemigo para los universitarios, debido a su valor económico, atrayendo a los jóvenes con un presupuesto acotado, siendo una alternativa conveniente y rápida. Por otra parte, esto conlleva una alimentación de productos procesados al ser en su mayoría altos en grasas y calorías, llevando al estudiante en un mediano plazo a desarrollar problemas de salud.

No obstante, existen opciones saludables dentro de la comida para llevar, un ejemplo de ello es Kinwa una tienda de alimentos vegetarianos y veganos, con un menú con gran variedad de verduras. El encargado de Kinwa, Alejandro Orellana, argumentó que “nosotros lo que vendemos generalmente es saludable y tenemos mucha venta de universitarios, puesto que nuestros productos son vegetarianos y veganos, igual hay clientes que prefieren comer en el local por lo saludable”.

Además, dentro de los ideales de algunos estudiantes también se destaca la búsqueda de lo saludable como Andrea Beltrán, estudiante de Biología en la UdeC, afirma que “lo ideal es que si compras comida rápida sea una opción más sana, hay que optar por lo que tenga un mayor aporte de proteína, verduras y grasas saludables”.

Las opciones saludables siguen aumentando y con ellas la exploración de nuevas aristas para una alimentación equilibrada. El estudio Policy Brief: Establecimientos de educación superior saludables: propuestas para mejorar el ambiente alimentario y de movilidad (2023), plantea la implementación de “puntos de feria” a precios accesibles al interior de los establecimientos haciendo un llamado a la compra de frutas y verduras.